El Gobierno relega la publicidad del juego ‘online’ a la madrugada y acaba con sus patrocinios deportivos

El Consejo de Ministros ha aprobado este martes el Real Decreto de Comunicaciones Comerciales de las Actividades del Juego, una norma muy restrictiva que limita la publicidad del juego online en televisión, radio, YouTube y plataformas de intercambio de vídeo exclusivamente a la franja horaria de una a cinco de la madrugada. Esto supondrá que los anuncios de casas de apuestas no podrán emitirse durante las retransmisiones deportivas, lo que ha levantado críticas de radios y televisiones, mientras el sector cree que impulsará el juego en páginas ilegales. Además, estas empresas no podrán patrocinar estadios ni camisetas de clubes. El Ministerio de Consumo avisó la semana pasada por carta a los equipos de fútbol de que deben finalizar sus contratos de publicidad de apuestas cuando acabe la temporada. En cualquier caso, el decreto incluye una moratoria para los contratos en vigor hasta final de temporada.

El departamento que dirige Alberto Garzón desarrolla así los artículos 7 y 8 de la Ley de Regulación del Juego de 2011 y legisla al fin un sector cuya publicidad ha crecido de forma exponencial en esta década. Según datos del ministerio, este incremento ha conllevado un aumento del consumo del juego entre jóvenes de 18 a 25 años: si en 2017 el 28% de los nuevos jugadores formaba parte de esta franja de edad, en 2019 se situaba en el 40%, un aumento de 12 puntos. “El objetivo es proteger la salud pública y a los colectivos más vulnerables, entre ellos los menores de edad, los jóvenes y los que tienen conductas patológicas por un uso intensivo de estas actividades”, ha explicado Garzón tras el Consejo de Ministros, que ha destacado que se cumple así con uno de los puntos del acuerdo de Gobierno de coalición.

Alberto Garzón sobre la publicidad del juego

Hasta ahora, los anuncios de casas de apuestas, muchos protagonizados por famosos y con estilo imperativo, se emitían a cualquier hora y llenaban las retransmisiones deportivas. Las asociaciones de exjugadores inciden en que este tipo de mensajes incitan a tomar decisiones impulsivas que pueden derivar en problemas de ludopatía. Según un estudio de la Dirección General del Juego, ahora dependiente de Consumo, en España hay unos 400.000 ludópatas. “Hace nueve años que se aprobó la ley del juego y no había regulación de la publicidad. Vivíamos en la ley de la selva. Ahora establecemos un régimen muy estricto”, ha defendido el ministro.

La nueva norma limita la agresividad de los mensajes y la apelación directa al usuario. Muchos de estos anuncios incluyen ahora frases como “¡Apuesta, apuesta, apuesta, gana, gana, gana!”, que con la nueva legislación quedarán prohibidos. Los contenidos tendrán que ser neutros, es decir, limitarse al nombre de la marca. Además, se prohíbe la publicidad de los bonos de captación de cualquier cantidad de dinero, si bien se permite que las propias páginas de apuestas ofrezcan bonos de hasta 100 euros (pero no que los publiciten fuera de ese espacio).

Los mensajes que vinculen el juego con el éxito personal y social también tienen los días contados, mientras que los anuncios televisivos y las cuñas radiofónicas no podrán estar protagonizados por famosos e influencers. “Los famosos y los futbolistas ejercen un rol de influencia enorme en menores y jóvenes”, ha apuntado Garzón. Este cambio en los mensajes afectará también a Loterías y a la ONCE, si bien no les afecta la limitación de horario. Tampoco se podrá trasladar la percepción de gratuidad de las promociones, ni inducir a confusión respecto a la naturaleza del juego, ni incluir testimonios de personas beneficiarias reales o figuradas.

La limitación también afecta a toda la publicidad que se visualice en internet, desde páginas webs hasta redes sociales, incluyendo prensa online. Los anuncios en prensa escrita no especializada —es decir, la generalista y la deportiva— también están afectados: solo está permitida cuando la edición es exclusivamente autonómica y la norma de la comunidad no lo impide. Según fuentes del ministerio, muchas leyes autonómicas prohíben este tipo de anuncios. Las vallas publicitarias no podrán anunciar este tipo de negocios, salvo que alguna comunidad autónoma lo permita expresamente, dado que muchas competencias en juego están transferidas.

La nueva regulación ha entrado en vigor este miércoles, día en que se ha publicado en el Boletín Oficial del Estado, por lo que desde ahora ya no podrán firmarse nuevos contratos. “Los actores que reciben la financiación, como medios y equipos de fútbol, tienen un año para adaptar sus esquemas y evitar el impacto económico”, ha apuntado el ministro. Los contratos en vigor se podrán mantener hasta el 30 de agosto del año que viene (cuando arranca la nueva temporada), mientras que las campañas publicitarias con personajes de relevancia que ya hayan sido contratadas no se podrán seguir emitiendo a partir del 1 de abril de 2021. En cualquier caso, lo que se emita desde ahora debe adaptar el contenido a la nueva normativa.

La tramitación de la normativa no ha estado exenta de polémica. En febrero, cuando se hizo pública, Garzón anunció que limitaría la publicidad del juego online en radios y televisiones al horario de madrugada, levantando las críticas de los sectores implicados, que la tacharon de “desproporcionada”. Después, el ministro reculó y sacó de la prohibición los partidos en horario de máxima audiencia y las camisetas de los clubes. Durante el estado de alarma, el Consejo de Ministros aprobó un decreto de urgencia muy restrictivo —más cercano a la intención inicial— para frenar el aumento del juego online a causa del confinamiento, pero ese decreto decayó en junio, precisamente cuando volvió el fútbol profesional. La norma definitiva que regula esta cuestión vuelve al punto inicial y contempla la máxima restricción.

La Dirección General de Ordenación de Juego será el organismo encargado de velar por que se cumplan estas condiciones en los anuncios y, en su caso, de multar a los infractores con sanciones que arrancarán en 100.000 euros y podrán llegar hasta el millón de euros e incluso al cierre del negocio durante seis meses.

La patronal Jdigital, que agrupa al 80% de los operadores de juego online en España, ha tachado el decreto de “discriminatorio, injusto y desproporcionado” y ha señalado que la regulación puede tener el efecto contrario al deseado, ya que aventuran que se producirá un aumento del juego ilegal que dejará desprotegidos a los colectivos vulnerables, dado que las páginas que no cumplen la legislación no impiden tampoco el acceso a menores o afectados por ludopatía. Además, Jdigital ha denunciado “la discriminación a la que se somete al juego privado con respecto al público”.