Jos Martín, as del periodismo de viajes

Jos Martín, uno de los profesionales europeos del periodismo de viajes más acreditado de España, colaborador de EL PAÍS y de numerosos medios, emisoras y televisiones, murió el pasado 21 de febrero en Madrid de una dolencia hepática. Había nacido en Zaragoza el 23 de julio de 1946, en el seno de una familia cuyo padre era militar. En la Universidad Politécnica de Madrid, estudió Arquitectura y en la Complutense, concluyó Periodismo. De natural emprendedor, imaginativo, interesado por todo aquello que supusiera un reto para la inteligencia y amante de la aventura, sus amigos y colegas le atribuyen un talante flemático y una serenidad crecientes con el paso del tiempo.

En su juventud se mostró muy sensible a la realidad cultural y política española, que vivió en primera línea desde las filas de la canción protesta en los duros años previos a la transición de la dictadura a la democracia, a cuya consecución contribuyó como los jóvenes más conscientes de su generación. Enamorado de la música, interpretaba con guitarra y piano. Recorrió numerosos escenarios españoles cantando, tras formar un dúo al que bautizó como Inma y Jos. Formó parte del grupo Madres del Cordero, junto a Moncho Alpuente, que alcanzó notable nombradía con su espectáculo Castañuela 70, verdadero dardo político juvenil en pleno rostro del franquismo. Asimismo, perteneció al grupo Desde Santurce a Bilbao blues band y al círculo musical de Luis Eduardo Aute.

Jos Martín abandonó poco a poco la música y se dedicó de lleno al periodismo cultural, así como a desplegar su vocación por el mundo de los viajes, la aventura y la fotografía, desarrollando una viva pasión por la Geografía y los deportes de riesgo. Fue directivo de la Asociación de Estudios del Pacífico y socio fundador de la Sociedad Geográfica Española, de la que ha sido su primer secretario general, además de creador de la revista informativa de la SGE. Patrono vitalicio de la Fundación Geográfica Española, en la actualidad, dirigía la Sección de Actividades de la Asociación Española de Africanistas. Sus allegados dicen que su africanismo procedía del destino de su padre militar en Ifni, mediados los años 50 del siglo XX.

Vivió en primera fila la canción

Entre sus cometidos periodísticos, Jos Martín trabajó para las revistas Primera plana, Sal y Pimienta e Interviú -fue autor de la entrevista con Marisol que dio la vuelta al mundo por las fotos de César Lucas, que la retrató desnuda-. Se desempeñó como jefe de la sección de Cultura y Sociedad de la revista Tiempo y como subdirector de la revista GEO, además de director de las revistas Escalada y Al límite. Responsable de la colección Exploradores españoles olvidados, fue también guionista de numerosos documentales para distintas televisiones españolas y estadounidenses.

Como enviado especial, cubrió contiendas bélicas para la prensa diaria en los Balcanes: ha publicado un millar de reportajes sobre viajes en EL PAÍS, El Mundo, Excelsior de México y en las revistas Newsweek, Elle, Siete leguas, Lonely Planet y Traveler Condé Nast. Asimismo, colaboró con organizaciones internacionales como Naciones Unidas y Cruz Roja. Hasta su fallecimiento, ha dirigido la agencia Livingnews y tiempo atrás, ejerció la dirección general de la empresa española Catai India, asentada en Nueva Delhi, donde Jos Martín colaboró con el Instituto Cervantes en Bombay.

Fue autor de la mítica

A su palmarés periodístico unió Jos Martín su dimensión de conferenciante en centros universitarios de España, Francia, Irlanda, Estados Unidos y la India. Ha sido autor de un poemario Sonetos rotos (Edit. De la A a la Z), del ensayo Antología popular obscena ( editorial De la Torre); del ensayo histórico Retrato vivo, (FFE), así como de los libros de relatos Viaje a tierras de vikingos y de otro más de crónicas, Los grandes exploradores (BBVA). Además de traducir a Tanya Mendonsa, su última obra ha sido la novela Clara al atardecer. En su faceta como fotoperiodista, ha mostrado sus obras en numerosas exposiciones en Madrid, así como en Copenhague y Nairobi, entre otras.

Unido a la periodista Amelia Die, tuvo con ella una hija, la cineasta y editora Luna Martín Die. Con Jos Martín muere un hombre de gran desenvoltura, muy unido al espíritu de su época, un tiempo de hondos cambios culturales y políticos, a los que brindó su sensibilidad profesional y artística, su sentido de la iniciativa, su afable sociabilidad y un temple generoso y valiente, versado hacia los recipiendarios de la información y, en lo personal, siempre atento a la amistad. Dispuso que sus cenizas fueran enterradas en Kenia, país al que amó profundamente, según sus allegados.