Declaran culpables a los acusados de la violación mortal de Amanat en la India

Los cuatro acusados de la violación en un autobús de la estudiante india Amanat en Nueva Delhi han sido declarados culpables. Y dado que la víctima murió poco después a causa de la agresión, los condenados se enfrentan a pena de muerte o cadena perpetua. El diciembre pasado cinco hombres, entre ellos un menor de edad, asaltaron a la estudiante de 23 años en el autobús donde esta regresaba a casa con un amigo tras haber ido al cine. Al chico lo golpearon y a ella la violaron repetidamente y le provocaron heridas internas con una barra de acero. Después los abandonaron semidesnudos en la calle. Dos semanas más tarde, Amanat murió. El suceso, que causó conmoción en todo el país, provocó un endurecimiento de la legislación.

“Han sido hallados culpables de violación en grupo, ofensas antinaturales, destrucción de la evidencia y asesinato de la víctima indefensa”, ha asegurado el juez Yogesh Khanna, reconocido por su imparcialidad y dureza. Mañana comenzarán a oírse los argumentos de la sentencia y posteriormente se sabrá el castigo que recibirán los inculpados.

Las evidencias en contra de los enjuiciados eran bastante fuertes. La víctima dio su testimonio antes de morir en un hospital de Singapur. También el amigo con el que viajaba en el autobús identificó a los hombres. Se encontró sangre de Amanat en la ropa de los acusados y los doctores que la atendieron aseguraron que las heridas causaron su muerte.

Además de los cuatro hombres hallados culpables, otros dos estaban acusados de violación. Uno de ellos, al que le restaban tan solo seis meses para cumplir la mayoría de edad, fue sentenciado la semana pasada por un tribunal juvenil a tres años en un reformatorio, la condena máxima para un menor.  Otro, presumiblemente el cabecilla del grupo, fue encontrado colgado en su celda en marzo pasado. Los oficiales de la prisión alegaron que se suicidó, mientras su familia denuncia que fue asesinado.

Durante el juicio, los acusados Pawan Gupta y Vinay Sharma aseguraron que estaban en una fiesta cuando ocurrieron los hechos. Un tercero, Akshay Singh, dijo que estaba en su aldea en el estado de Bihar, al este del país. Y Mukesh Singh, hermano del que fue hallado muerto en su celda, primero negó estar presente, pero luego cambió su versión y dijo que él solo conducía el autobús; que no vio nada porque las luces estaban apagadas. Sus defensas no han convencido al juez.

A las puertas del tribunal, frente al cine del que la víctima y su acompañante habían acudido aquella tarde de diciembre, se han congregado cientos de ciudadanos y numerosa prensa local e internacional para escuchar el veredicto. Algunos de los manifestantes, entre ellos la familia Amanat, reclamaban la pena máxima para los cuatro agresores.

La directora del Centro del Centro de Investigaciones Sociales, Ranjana Kumari, se ha felicitado por el veredicto. “Esperamos que los culpables reciban el castigo más estricto de acuerdo con la ley”, ha expresado. Además, añade que este juicio, que ha durado siete meses, "debe servir como ejemplo" para que se haga justicia a todos los casos de violación pendientes en el país. "Aunque falta un gran camino, las cosas en India para las mujeres han empezado a cambiar y hay esperanza", ha asegurado.

Tras la violación, se aprobaron leyes más estrictas en contra de la violencia de género. Entre ellas se puede ahorcar al violador que cause la muerte o deje en estado vegetativo a la víctima. También se penalizan los ataques de ácido y el acoso y se hace responsables a los servidores públicos que no traten correctamente un caso.