El Congreso ignoró la petición del CSN de hablar sobre Fukushima

El pleno del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha acordado pedir la comparecencia en el Congreso de la presidenta del organismo, Carmen Martínez Ten, para que responda allí al informe de la Comisión Europea sobre los fallos de las nucleares a raíz del accidente nuclear de Fukushima. No es la primera vez que Martínez Ten pide explicarse en el Congreso —ya lo hizo en marzo de 2011— pero la Cámara no atendió la petición. Ni esa ni la solicitud de hace un año para presentar el informe anual de 2010. El resultado es que más de un año y medio después de Fukushima, el CSN sigue sin poder explicar la situación de las nucleares españolas ante el Congreso, el órgano del que depende. En la Cámara responden que es un asunto de la pasada legislatura.

El pleno del CSN acordó en una reunión extraordinaria el pasado 4 de octubre “solicitar la comparecencia en el Congreso de los Diputados de la presidenta para informar sobre los resultados de las pruebas de resistencia realizadas a las centrales nucleares españolas”, según el acta del pleno.

En el CSN había malestar por cómo la Comisión había presentado los resultados. Consideraban que daba la impresión de que el parque nuclear europeo está plagado de fallos. En una reunión previa en Bruselas, Martínez Ten había dejado patente su malestar con el borrador preparado por la Comisión. Con la comparecencia, el CSN quería dar una respuesta formal al comisario de Energía, el alemán Gunther Oettinger, considerado antinuclear por buena parte del sector atómico. El pleno del CSN está compuesto por cinco consejeros —dos a propuesta del PP, dos del PSOE y uno de CiU— y responde ante la Comisión de Industria del Congreso, no ante el Gobierno. El CSN buscaba una vía para responder a Oettinger distinta a la que usó por ejemplo la Autoridad Nuclear Francesa (ASN). Su presidente André-Claude Lacoste envió una carta al Gobierno francés criticando el proceso seguido por la comisión, según la agencia Platts.

Sin embargo, la comparecencia de Martínez Ten no tiene por qué ser automática. El 16 de marzo de 2011, cinco días después del accidente de Fukushima, ya pidió acudir a la Cámara. No recibió respuesta. En otoño pasado volvió a pedir comparecer para presentar el informe anual de 2010, una cita que hasta ahora era una rutina. Como se disolvieron las Cortes poco después, no hubo comparecencia.

El resultado es que desde el 1 de diciembre de 2010, Martínez Ten no comparece en el Congreso. En medio ha habido el peor accidente nuclear en 25 años, pruebas de resistencia a las nucleares, el CSN ha impuesto obras millonarias a las plantas y se ha producido una renovación de ida y vuelta a la nuclear de Garoña.

El presidente de la Comisión de Industria, Pablo Matos, del PP, señaló ayer que antes del verano se constituyó la ponencia del CSN y que ya no tenía sentido pedir la comparecencia de Martínez Ten para que presentara el informe de 2010, que lo mejor era que presentara el de 2010 y el de 2011 conjuntamente. Sobre por qué no se aceptó la petición de comparecencia tras Fukushima, Matos señaló que era algo de la legislatura anterior.