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Los gibones cantan impostando la voz

Los monos consiguen ser escuchados a dos kilómetros

Un gibón con su cría en el zoo de Varsovia.
Un gibón con su cría en el zoo de Varsovia.KACPER PEMPEL (Cordon Press)

Los gibones son unos monos famosos por su voz. Viven en espesas selvas tropicales asiáticas, y su canto es tan peculiar que hay estudios que aforman que se puede distinguir el acento de los que habitan cada región. Pero aparte de variabilidad, tienen potencia. Es la única manera de que sus gritos —comunicación, alerta y reclamo todo en uno—lleguen hasta los dos kilómetros.

Lo que no se había estudiado era cómo emitían sus sonidos. Investigadores japoneses lo han hecho haciéndoles respirar helio. Este gas altera las cuerdas vocales, y acentúa su agilidad y vibración (por eso los sonidos salen más agudos). Así se puede estudiar mejor qué parte del sistema fonador actúa y en qué manera. La sorpresa, según relatan en American Journal of Physical Anthropology, es que el mecanismo no es nuevo. Es el mismo que utilizan los cantantes líricos para hacerse oír: impostar la voz.

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