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Muere el anciano más viejo del mundo

El ucraniano Hryhoriy Nestor fallece a los 116 años.-Atribuía su larga vida a no haberse casado nunca

Hryhoriy Nestor, un soltero ucraniano a quien se consideraba el ser humano más viejo, ha fallecido a los 116 años en su país natal, según informa BBC.co.uk.

Nestor murío el viernes mientras dormía en la localidad de Stara Yarvchev, en la región occidental de Lviv, según el rotativo Segodnya. Ha muerto, sin embargo, antes de que se enviara una prueba de su edad al Libro Guinness de los Récords. El ser humano más longevo es oficialmente la estadounidense Edna Parker, que cumplió 114 en abril.

El fallecido sostenía que nunca encontró pareja porque era bajito y no tenía dinero, según señaló un familiar. Y precisamente atribuía su larga vida al hecho de no haberse casado nunca. Tan sólo unos pocos familiares y vecinos se reunieron para darle el último adiós. Siguiendo sus deseos, en su funeral ser sirvió un almuerzo con sus platos favoritos: patata caliente con arenque y col con salchicha casera.

Una vida activa hasta el final

Uno de los familiares con los que convivió, Oksana, señaló que Nestor llevó una vida activa hasta el final, ayudaba en las pequeñas tareas de la casa. Cuando nació Nestor, la esperanza de vida en Europa era de 50 años y Adolf Hitler ni siquiera tenía dos años. La ciudad de Lviv se llamaba Lemberg y formaba parte del imperio austrohúngaro. Sarah Bernhardt y Chaikovsky se preparaban para iniciar una gira por Estados Unidos.

Y así fue hasta el viernes pasado, cuando se remojó la cabeza con agua fría, porque había estado sufriendo dolores de cabeza desde hacía un tiempo. "Su muerte nos sorprendió. Sencillamente no se despertó más", señaló Oksana. "Tras la muerte de su amo, su gato favorito, Murchik, no se acomodó en su rincón como solía hacer, sino que se arrellanó en su cama", añadió.

Una soltería que le valió un siglo de vida

Los documentos familiares aseguran que Nestor nació el 15 de marzo de 1891, y trabajó la mayor parte de su vida como granjero. Atribuía su longevidad al hecho de no haberse casado nunca. "Nunca encontró pareja porque era bajito y no tenía dinero", considera su familiar.

Llevó una vida saludable, según Oksana. Le encantaba salir descalzo para caminar por la hierba. Bebía vodka con moderación y su comida favorita eran los platos regionales con un trozo de salchicha en una hogaza de pan como máxima delicia.

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