España vive el periodo más seco de los últimos 60 años

El Instituto Nacional de Meteorología ha advertido hoy de que la escasez de precipitaciones durante el otoño y el invierno pasados ha provocado una situación de "extrema sequía" en los últimos siete meses. Es más, el periodo comprendido desde noviembre a marzo es el más seco desde que se comenzó a recopilar los datos sobre precipitaciones, en 1947.

De acuerdo con los datos del INM, a 31 de marzo el volumen total de agua acumulado por las precipitaciones en los últimos siete meses es un 37% inferior al valor medio habitual para esas fechas. Por ejemplo, en enero sólo llovió el 16% de lo habitual; cuando más precipitaciones se registraron fue en diciembre, y eso a pesar de que sólo alcanzaron el 62% de la media de los últimos años.

Este pasado invierno la precipitación media en la Península es de poco más de 70 milímetros de agua, frente a los 200 milímetros de valor normal. Pero la situación es especialmente grave en una amplia franja central del país donde las precipitaciones invernales no llegaron a acumular ni siquiera la cuarta parte de lo habitual: el sur de Castilla y León, Extremadura, Madrid, Castilla-La Mancha, el norte de Andalucía y Aragón.

El predominio de las altas presiones invernales sobre el suroeste de Europa y la colocación con frecuencia del anticiclón al oeste o noroeste de la península ibérica ha propiciado la entrada en la península de masas de aire de origen ártico o polar en diversos episodios a lo largo del invierno, sobre todo en su segunda mitad, lo que ha propiciado que las temperaturas medias fueran inferiores a las normales.

La única e da en el archipiélago canario, sobre todo en las islas más occidentales, donde al año está siendo bastante húmedo, así como en zonas de tamaño reducido del extremo sureste peninsular (en Almería y el sur de Murcia), Baleares y áreas muy dispersas del norte peninsular donde las lluvias oscilan en torno al valor medio o lo superan muy ligeramente.