_
_
_
_
_

El Papa coloca al frente de la diócesis de Boston a un experto en la lucha contra los abusos

El cardenal Bernard Law dimitió el pasado diciembre tras ser acusado de no actuar con firmeza en los casos de pederastia que afectaron a la Iglesia católica en EE UU

El Papa Juan Pablo II ha nombrado hoy arzobispo de Boston (EE UU) al prelado Sean Patrick O'Malley, que sustituye en el cargo al cardenal Bernard Law, obligado a presentar su renuncia el pasado mes de diciembre a causa de los escándalos de pederastia, ha informado el Vaticano.

O'Malley era hasta ahora obispo de Palm Beach. Como nuevo prelado de esta diócesis el Pontífice ha nombrado a Gerald M. Barbarito, hasta hoy obispo de Ogdensburg (Nueva York).

Más información
Casi todas las diócesis católicas de EE UU tienen un historial de abusos sexuales
La Diócesis de Boston vende la residencia del obispo para compensar a las víctimas de abusos

Con el nombramiento de Sean Patrick O'Malley, un franciscano de 59 años, considerado un experto en la lucha contra los abusos sexuales en el clero y con fama de afrontar con decisión esos casos, el Vaticano ha querido enviar una "fuerte señal" de renovación a la importante archidiócesis de Boston, a la que pertenecen más de dos millones de católicos.

El nuevo arzobispo es conocido en Estados Unidos por su papel en contra de la pedofilia en los lugares donde ha ejercido previamente su mandato. Según señala la cadena de televisión NBC, O'Malley fue enviado a Fall River para limpiar la crisis surgida a principios de los 90 después de que el reverendo James Porter fuera acusado de molestar a niños. Finalmente el religioso se declaró culpable y fue condenado a 18 años de prisión.

"No podría haber nadie mejor en todo el país para este trabajo y par intentar curar las heridas en la archidiócesis de Boston", ha declarado a la cadena el fiscal Roderick MacLeish, que representó a algunas de las víctimas del reverendo Porter.

Permisivo con los abusos sexuales

El cardenal Law, de 72 años, se vio obligado a dimitir el 13 de diciembre del pasado año tras ser acusado de no haber actuado con decisión y no haber tomado durante décadas medidas contra los sacerdotes de Boston que habían sido denunciados reiteradamente por abusos sexuales en su archidiócesis, limitándose a trasladarlos de parroquia.

El nombramiento de O'Malley, del que se hablaba ya en los últimos días, ha sido acogido con satisfacción por los católicos de Boston, deseosos de poner fin a una pesadilla que se ha prolongado durante años.

Boston, donde fueron presentados 450 denuncias por supuestos abusos sexuales por parte de sacerdotes, fue la punta de lanza de otros escándalos de este tipo que afectó a otras diócesis de EE UU y que ha puesto en la picota a la Iglesia Católica en ese país.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_