La parricida de Santomera tenía un amante al que llamó después del crimen
La hipótesis de que alguien empujó a la presunta asesina a matar está descartada absolutamente por la Guardia Civil
Paquita González, la presunta parricida de 33 años acusada de estrangular a sus dos hijos en Santomera, mantuvo una relación amorosa al margen del matrimonio durante los seis meses, y al que llamó por teléfono después del crimen, según publica hoy el diario La Opinión de Murcia.
Fuentes judiciales muy próximas a la investigación que se sigue en el juzgado de instrucción número 5 de Murcia asegurara que Paquita se ha derrumbado en los últimos días y ha reconocido abiertamente que estaba "profundamente enamorada" de un hombre que no era su marido.
Esta relación extramatrimonial podría ser importante para desentrañar el caso y para determinar si Paquita pudo matar a sus hijos de 4 y 6 años inducida por una tercera persona que podría ser su amante.
Aunque la hipótesis de que alguien empujó a la presunta asesina a matar está descartada absolutamente por la Guardia Civil, que siempre han mantenido de que la parricida actuó en solitario, el romance pudo actuar como "un desencadenante más" en la desequilibrada conducta mental de la presunta parricida, obsesionada con hacer daño a su marido a toda costa.
Empresario murciano
Al parecer, este misterioso personaje, que al parecer es un empresario murciano, también atravesaba una profunda crisis personal debido a graves problemas familiares.
Las fuentes judiciales consultadas por La Opinión añaden que minutos después de estrangular a los dos pequeños, Paquita cogió el teléfono móvil, marcó el número de su amante y se desahogó con él. El contenido de la conversación es aún un enigma, aunque la Guardia Civil ha investigado esa llamada y rechaza de plano que tenga algo que ver con el crimen.
Lo que no se descarta, sin embargo, es que durante ese diálogo en la noche entre la pareja, cuando aún estaban calientes los cadáveres de los dos pequeños, Paquita pusiera a su amante al corriente de lo que había hecho. Obviamente, esa llamada, como otras realizadas en días anteriores, quedaron registradas, y el marido de la parricida, José Ruiz Nicolás, ha tenido constancia de ellas a través del extracto mensual que Telefónica envía a sus clientes para ponerles al corriente de su factura.
Coartada
Si la llamada a su amante es todavía una incógnita, la que hizo a su marido, que en esos momentos se encontraba a cientos de kilómetros de Murcia, fue directamente encaminada a montar una coartada convincente al tratarle de convencer de que un ladrón había entrado en la casa y había hecho daño a los niños.
Según las mismas fuentes judiciales consultadas, Paquita González y su amante se veían habitualmente, en ocasiones durante todos los días de una semana, e incluso llegaron a pasar alguna jornada en un apartamento de los utilizados para pasar los fines de semana.
Por su parte, el diario El Faro de Murcia publica el juez que lleva el caso ha decidido suspender las visitas de paquita al psiquiátrico, por considerar que los estudios que se le están realizando han finalizado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.