Tras el Spanx… el milagro de los jeans-faja
La tecnología revoluciona el mercado del denim de alta gama. Mucho más que otro tejano skinny. La última generación de vaqueros superstretch promete hasta dos tallas menos.
Primero fue el pitillo –convertido desde hace más de 10 años en el único modelo capaz de sobrevivir a los vaivenes de las tendencias (y de la economía)–. Después llegaron los jeggings (más elásticos). Y esta temporada un nuevo diseño está revolucionando el mercado. Son los jeans superstretch: vaqueros muy ajustados que utilizan la misma tecnología prodigiosa que las prendas moldeadoras de Spanx.
«Encontrar el tejano perfecto es el santo grial de las mujeres», explica a S Moda Ilse Van Alsenoy, directora de Merchandising y Diseño de la colección de mujer de Levi’s en Europa. «Comprar un modelo que se adapte a tu cuerpo es ya de por sí complicado. Pero hoy las mujeres no se conforman con eso. Quieren comodidad, tendencia y efecto reductor». El tres en uno del denim. Lo que J Brand ha denominado «jeans con resultado Photoshop». Su modelo Photo Ready ha disparado (una vez más) las ventas de la firma en Estados Unidos. ¿La fórmula? Una mezcla de algodón, poliéster y elastano que reduce el volumen del cuerpo hasta dos tallas. Tal es la euforia desatada que, a pesar de no bajar de los 200 euros, este fitting de J Brand desaparece de las perchas (en tiendas como Bloomingdale’s la primera remesa se agotó en apenas unos días).
Victoria Beckham con un modelo de su línea de denim.
Cordon Press
¿Es el pitillo-faja la nueva gallina de los huevos de oro del mercado premium? «Sin duda», defiende Jessica Lawrence, directora de Diseño y desarrollo de MiH Jeans. Las cifras avalan su opinión: si en 2007 el sector cayó en picado con la crisis (los compradores no entendían por qué debían pagar más por un vaquero), hoy este segmento es el que más rápido está creciendo. Según el último informe publicado por el grupo de investigación NPD, de marzo de 2012 a febrero de 2013 el número de jeans de alta gama vendidos creció un 16,4% respecto al mismo periodo del año anterior. El responsable de este cambio de actitud es el relanzamiento de las colecciones para mujer (más femeninas), por delante de las líneas orgánicas o sostenibles.
«La nueva tecnología en fibras textiles no solo hace posible que los vaqueros compriman (y remodelen) el cuerpo, sino que permite además que el algodón conserve su elasticidad, sin el vilipendiado efecto baggy (que crea bolsas en la rodilla)», asegura Lawrence. «De hecho, estoy convencida de que las marcas de denim premium van a sustituir el básico stretch por este nuevo tipo de tejidos en casi todas sus líneas. Sencillamente, es mucho mejor y favorece más».
Pocas veces el desarrollo de una fórmula química ha despertado tanto interés entre las fashionistas. Lawrence descifra cómo funciona: «Se entreteje en la trama del algodón una combinación de elastano y fibras de stretch de poliéster en forma de espiral, como si fuera un muelle. De manera que al moverte, en lugar de ceder, el tejido siempre tiende a volver a su sitio».
Vaquero Bodycon de MiH Jeans, con tecnología super-stretch.
D.R.
Sin embargo, no es solo cuestión de química… Ni siquiera de talla. Según Rebekka Back, directora creativa de la colección para mujer de G-Star, «un vaquero debe dar confianza a la chica que lo lleva». Hace tiempo que el pitillo dejó de ser una prenda de uso exclusivo para jóvenes hiperdelgadas como Alexa Chung. Hoy lo usan a diario también mujeres voluptuosas y contundentes como la primera dama de Estados Unidos Michelle Obama. Compradoras que buscan en este básico un comodín capaz de esculpir su silueta. Por eso firmas como Levi’s aplican en el desarrollo de sus tejidos principios propios de la industria cosmética y maquillan sus jeans con acabados especiales para crear un efecto lifting en zonas estratégicas. Otro ejemplo de la evolución constante del sector.
Los jeans Levi’s® Revel moldean, estilizan y alargan el cuerpo con su tecnología Liquid Shapping.
D.R.
Michelle Obama con pitillos metalizados de Helmut Lang.
Cordon Press
Alexa Chung, en el lanzamiento de la fragancia de Marni.
Cordon Press
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.