Cómete Madrid: cinco restaurantes imprescindibles para celebrar estas fiestas

Con estrella Michelin, con un DJ a los mandos, con alma cervecera, bullicioso y animado, rendido al producto… Hay cinco restaurantes de Madrid que tienes que conocer sí o sí según la Ruta Incombustible IQOS*. Hay uno para cada ocasión. Uno para cada estado de ánimo. Para disfrutar en diferentes compañías. El noctámbulo, el gourmet, el que anda en busca del sitio más animado, el que va a la caza del local más instagrameable: cada uno de ellos encuentra en esta ruta su parada ideal… Todos los restaurantes son diferentes entre sí pero todos tienen, al mismo tiempo, algo en común: querrás volver a ellos una y otra vez, y cada uno tiene un aire especial para acogernos en estas próximas fiestas. Por algo son ‘incombustibles’.

La Fonda Lironda

Producto de mercado, un interiorismo impecable y toneladas de buen rollo se combinan en la fórmula que ha consagrado a La Fonda Lironda como uno de los restaurantes más solicitados del centro de Madrid. En su carta, opciones clásicas de toda la vida que aquí adquieren un nuevo aire por obra y gracia del carbón, el fuego, el humo y la parrilla, que aportan matices insólitos a propuestas como la oreja a la plancha, las alcachofas salteadas, los huevos fritos con boletus o el picantón de las Landas a la brasa. En la sobremesa, un cóctel con sesión de DJ en vivo logra que esa atmósfera de impecable casa de comidas vire hacia un territorio más desenfadado y cosmopolita, convirtiendo La Fonda Lironda en el sitio perfecto donde comenzar la noche… Y también donde acabarla.

Génova, 27.

La Mamona de Chamberí

No es fácil destacar en la calle Ponzano, una de las zonas de alterne más acreditadas del efervescente barrio de Chamberí. Haciendo honor al apelativo de “cervecero”, que ellos reivindican, este restaurante se ha convertido en todo un referente entre la amplia oferta de la zona. Es este un sitio versátil, el perfecto comodín que no falla para un aperitivo informal en barra, un afterwork en sus mesas altas o una comida o cena en el acogedor salón acristalado y de ladrillo visto decorado con plantas y mobiliario estilo rusticool. Su ensaladilla rusa, los huevos revueltos con pulpo o el entrecot fileteado, perfecto para compartir, son algunas de las opciones de una carta volcada en la tradición, pero que siempre logra sorprender.

Ponzano, 7.

Fortuny Restaurant & Club

La noche más cool, divertida y gamberra en Madrid pasa sí o sí por este multiespacio que está en boca de todos. Ubicado en un fantástico palacete del siglo XIX restaurado como destino de fiesta y eventos, la oferta de Fortuny Restaurant & Club no deja dimensión alguna del ocio más chic sin explorar. Cuenta con un restaurante de cocina mediterránea, terraza, gin club, carta de cócteles y una exclusiva propuesta llamada “sushi, champagne y caviar”: todo un abanico de opciones a medida del mood de cada ocasión. Un espectacular interiorismo ecléctico que mezcla plantas exóticas, terrazas cubiertas tipo invernadero y neones lo convierten en uno de los locales más fotogénicos de la capital. Aquí el like está asegurado.

Fortuny, 34.

Coque

Este templo gastronómico con dos Estrellas Michelin atrae hasta la capital a foodies llegados desde muy lejos para vivir en primera persona la experiencia de su menú escenificado en cuatro escenarios. La coctelería, la bodega, la cocina y la sala son las cuatro paradas de la ambiciosa y sorprendente propuesta de los hermanos Sandoval: Mario, en la cocina; Rafael, como sumiller; y Juan Diego, al frente de la sala. Un local espectacular –a la altura de su menú y de su bodega– redondea el ritual. Cocina contemporánea de autor con propuestas como la quisquilla de Motril con jugo de gamba blanca al amontillado o el sashimi de salmonete curado con cítricos y huevos de Lucio coquetean con la fusión en un menú en el que no falta el emblemático cochinillo con su piel crujiente lacada que consagró el sello Coque en su primer, y legendario, restaurante de Humanes.

Marqués de Riscal, 11.

Bar Carallo

De las lonjas de la costa Atlántica de Galicia a la Milla de Oro de Madrid, la cocina de Carallo es una oda al sabor y al producto. Tradición interpretada en clave contemporánea en una propuesta de cocina non stop y de vanguardia que rinde tributo al recetario clásico gallego. En una escenografía cuidada hasta el más mínimo detalle –preciosa vajilla de loza oscura, guiños industriales, mobiliario depurado…–, uno toma asiento y come como lo haría en casa de una entregada abuela gallega: mollete de calamar de potera, pimientos de Padrón, entrecot de vaca rubia, pulpo, berberechos, ostras con Bloody Mary… Sí, porque también hay espacio para los cócteles –no te pierdas el Galician Espresso Martini– a mano de su bartender.

Serrano, 43.

*IQOS no está exento de riesgo y con su uso se inhala nicotina, que es adictiva. Dirigido únicamente a adultos.