Olivier Lapidus deja Lanvin tras dos colecciones

A finales de febrero saltó la noticia bomba: el conglomerado de empresas chino Fosun Groups –propietario de los hoteles Med– compraba Lanvin, la casa de alta costura más antigua de Francia. “No tenemos duda alguna sobre el fantástico potencial de crecimiento de esta marca de reputación mundial”, expresó el presidente de Fosun International, el multimillonario Guo Guangchang. El conjunto de empresas también controla, en el mundo de la moda, la marca de accesorios Folli. No ha pasado ni un mes desde el anuncio de adquisición para que empiecen a vsilumbrar los movimientos en la casa francesa: hoy ha anunciado que abandonan la empresa Olivier Lapidus, director creativo y Nicolas Druz, consejero delegado.

Lapidus, hijo de Ted Lapidus –el diseñador de ropa de Los Beatles–, llegó en julio de 2017 con la voluntad de que Lanvin «se convirtiera en el Michael Kors francés», es decir, con una voluntad de funcionalidad comercial en el mercado. El objetivo era tratar de enderezar la deriva económica que la firma había experimentado desde la salida de Alber Elbaz en 2015 y la consecuente caída de ingresos (en 2016 alcanzaron el 23%), un descenso en ventas que tampoco puedieron enderezar las dos colecciones de Bouchra Jarrar en la casa francesa.

Al contrario que Elbaz, que tuvo sus desavenencias con la anterior dueña de la firma –la taiwanesa Shaw-Lan Wang–, Lapidus conocía a la propietaria desde hacía tres décadas. La venta de Lanvin a un nuevo grupo podría haber trastocado el plan que el creador había trazado con la anterior empresaria y su renuncia, anunciada hoy, tiene efecto inmediato. A partir de ahora, las colecciones de moda femenina serán concebidas por un equipo de diseño interno. Druz, por su parte, asume ahora un cargo de nueva creación, el de director general de la división de moda de Fosun Group, según WWD. Desde su nuevo puesto, el ejecutivo dará apoyo a la expansión del negocio en Europa. Joann Cheng asumirá el anterior cargo de Druz de forma provisional.