Nicolas Ghesquière: «Quiero que mis diseños perduren en el tiempo»
Apenas unos días después de su debut al frente de Louis Vuitton, el creador comparte en exclusiva con S Moda su visión (y el futuro) de la casa francesa.
¿Qué fue antes? ¿El it-bag o el prêt-à-porter? En el caso de Louis Vuitton, no hay duda: los bolsos. Y es precisamente en sus diseños más emblemáticos donde Nicolas Ghesquière (43 años) ha encontrado la inspiración de su primera colección para la maison. «La marroquinería es el punto de partida», explica el francés en unas declaraciones concedidas en exclusiva a S Moda la misma semana del desfile (el más esperado de la fashion week de París). «Es una día muy emocionante», anunciaba Anna Wintor, de Vogue USA, la mañana del 5 de marzo, apenas unos minutos antes de su debut, a las puertas del Cour Carreé del Louvre. Su frase resumía el sentimiento y, sobre todo, la expectación ante el regreso del hijo pródigo de la industria (en noviembre de 2012 Ghesquière abandonó por sorpresa Balenciaga, tras 15 años al frente de la firma, a la que convirtió en una de las más influyentes de la última década).
La localización era la misma que Marc Jacobs utilizó durante 16 años. Pero frente a la teatralidad del creador estadounidense, Ghesquière inundó de luz una escenografía minimalista, donde los espectadores casi podían tocar las prendas y, sobre todo, los accesorios, convertidos en hilo conductor de una propuesta en la que había una intención clarísima de rejuvenecer la firma (una fórmula que tan buenos resultados ha dado recientemente en otras grandes casas francesas). «Siempre he creído que los complementos de Louis Vuitton son muy potentes, y he querido que sus prendas transmitieran esa fuerza», argumenta. «Detrás de todas y cada una de las siluetas hay un bolso». Así explica Ghesquière el primer eslabón del proceso creativo de una colección que ha construido en apenas cinco meses [desde que lo reclutó Delphine Arnault, vicepresidenta ejecutiva de la marca Louis Vuitton e hija del consejero delegado de LVMH, Bernard Arnault]. «Quería conseguir una unidad indisoluble entre el bolso y el look. Los detalles en cuero, los toques metálicos, las cremalleras… Todos los elementos remiten a la marroquinería», describe.
«Hemos creado un bolso que es un minibaúl, que rinde tributo a los orígenes de Louis Vuitton», dice Nicolas. «Porque los bolsos guardan nuestras pertenencias más preciadas».
Juergen Teller para Louis Vuitton
Construyendo una nueva era. «Times is now» (en español, la atemporalidad es ahora). «Es un mantra que me gusta recordar», explica Ghesquière. «Mi intención era hacer algo espectacular, que fuera fiel a Louis Vuitton, pero a mí manera. Por supuesto que quiero sorprender e innovar, pero también deseo que mis creaciones perduren en el tiempo… y no solo una temporada. Lo que hoy es un clásico, en algún momento fue rompedor», insiste. Esta convicción quedó reflejada el mismo día del desfile en la carta mecanografiada, firmada por Nicolas, que el equipo de comunicación de la marca dejó en los bancos donde se sentaron los asistentes al show: «¿Acaso no sueñan todos los diseñadores con crear prendas eternas?».
«Para mí, Louis Vuitton es la quintaesencia del savoir faire contemporáneo. La combinación perfecta entre tradición, progreso, lujo y artesanía», dice. «Creo firmemente en que la innovación y la historia pueden ir de la mano. En esta casa, las prendas se prestan a nuevas interpretaciones. Y ese ha sido el reto. Diseñar algo nuevo sin perder la identidad y el espíritu de la firma. Preservar el clasicismo y la autenticidad de la maison sin dejar de mirar hacia el futuro».
Tras la aparente sencillez de la colección (con muy pocas variaciones de silueta), hay un gran ejercicio de experimentación, en el que la inesperada combinación de materiales anuncia un nuevo lujo. «Ha sido maravilloso poder investigar, buscar ideas, compartir tiempo con los artesanos… He trabajado codo a codo con todos los equipos y los estudios. Sin descansar», confiesa. «Hemos combinado muchos materiales, mezclándolos entre sí». ¿El resultado? «Tejidos que juegan con el concepto falso/auténtico; o patchworks de piel con punto, por ejemplo, en los que los equipos de peletería y tricot han tenido que colaborar mano a mano», describe.
Juergen Teller para Louis Vuitton
Louis Vuitton es el mayor productor de artículos de cuero del planeta. Las líneas de los bolsos se adaptan ahora a las nuevas clientas: más jóvenes y cosmopolitas.
InDigital
«He diseñado para una mujer elegante, con un estilo muy definido, más real», explica.
Juergen Teller para Louis Vuitton
«La fémina que yo imagino tiene un ‘easy mood’. No necesita llevar tacones altísimos. Quiere caminar de manera elegante», dice Ghesquière. A la izquierda, pitillos de vinilo y botines de cocodrilo.
Juergen Teller para Louis Vuitton
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.