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Opinión
Texto en el que el autor aboga por ideas y saca conclusiones basadas en su interpretación de hechos y datos

Reescribir una convención

Los estereotipos sirven para recordarnos que el mundo evoluciona.

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Las grandes historias románticas acostumbran a seguir el mismo patrón (un estereotipo caduco): chico conoce a chica, chico pierde a chica, chico recupera a chica; con algún giro de acontecimientos entre medio. Puede que haya un gran gesto, tal vez alguien pierda un avión o se produzca una escena de persecución de un taxi en algún puente de Nueva York, quizá alguien atraviese corriendo un aeropuerto. La pregunta de fondo siempre es la misma: ¿lograrán los protagonistas superar los obstáculos que la vida interpone en su camino y acabar juntos? En muchas de estas tramas, una chica no logra decidirse entre dos hombres: generalmente un buen tipo, con el que tiene una relación estable y algo aburrida, y otro amor intenso, probablemente intermitente y en muchas ocasiones atormentado, que la hace vibrar.

De entrada, la película Past Lives (el debut de la directora coreano-canadiense Celine Song) parece cumplir todos los tópicos del género. Relata la historia de Na Young, nacida en Corea del Sur, cuya familia migra a Canadá cuando tiene 12 años, dejando atrás a su mejor amigo y amor platónico del colegio, Hae Sung. Na Young empieza una nueva existencia bajo el nombre de Nora Moon, en Canadá y más adelante en Nueva York, donde busca ganarse la vida como escritora. Es entonces cuando descubre que Hae Sung lleva años buscándola, y que quiere reconectar con ella. Empiezan a hablar por videollamada y a hacer planes para quedar, pero justo en ese momento Nora conoce a Arthur, otro aspirante a escritor en una residencia de artistas. Cuando Hae Sung le anuncia, 24 años después de su despedida, que va a Nueva York de viaje, Nora se encuentra intentando ver como encajan sus dos vidas: su infancia en Corea cada vez más lejana y su vida adulta en Estados Unidos, junto a Arthur y en inglés. El regreso de Hae Sung implica la resignificación de esa infancia, la muerte de las posibilidades que nunca fueron, la niña que existió en otra vida que ya no es la suya.

Pero Past Lives se niega a caer en la convención de un triángulo amoroso clásico. Nora no es una pobre chica indecisa que se deja arrastrar por las decisiones de los hombres a su alrededor, sino una mujer decidida y con las ideas claras sobre su vida creativa y las decisiones que ha tomado. Es una película sobre lo que significa dejar una existencia atrás para empezar otra completamente nueva. Igual que la directora cambia las convenciones del género para explicar una historia distinta, la protagonista busca aceptar los recuerdos de su pasado y la distancia que los separa de su presente. Los estereotipos nos recuerdan que el mundo evoluciona, y nos pueden servir como punto de partida para crear otras versiones.

El que lee, el que mira y el que escucha puede cambiar también la interpretación de una historia clásica y darle un nuevo significado. En No leer, Alejandro Zambra propone otro acercamiento a los autores que idolatra, y leerlos bajo una luz nueva: “Supongo que eso sucede siempre al releer, que por eso releemos la obra de un escritor admirado: somos capaces de formular la admiración, de fundamentar las preferencias, de bosquejar artículos y columnas, pero al regresar a los textos las certezas se rompen, y construimos, esta vez, recuerdos nuevos”. Y Celine Song demuestra que con cada camino no escogido, una vida paralela deja de existir, y esto también puede ser una historia de amor.

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