Gwyneth Paltrow se desnuda ante el objetivo de Ellen von Unwerth, la fotógrafa de la mirada sexual femenina

«Si al ver a una modelo de 28 años en Instagram pienso que mi vientre debería verse así, me deprimiría. Así que realmente he intentado separarme de ese tipo de comparaciones», le explica Gwyneth Paltrow a Emma Rosenblum, jefa de contenidos de Bustle Digital Group, en la entrevista del tema de portada del nuevo especial de belleza de Bustle. Esta publicación estadounidense lanzada en 2013 está dirigida a las mujeres jóvenes y por su portada han pasado figuras como Camilla Cabello, Issa Rae o Rachel McAdams. Ahora la actriz y empresaria estadounidense se suma a ellas en una sesión de fotos que reivindica su lado más sexy a los 51 años. Con transparencias y siguiendo la tendencia no-pants que se ha dejado ver en las pasarelas y las alfombras rojas recientemente —gracias a marcas como Miu Miu, Tom Ford, Viktor & Rolf o Vivienne Westwood—, Paltrow ha posado para el objetivo de la fotógrafa alemana Ellen von Unwerth, una experta en plasmar la sensualidad y la sexualidad, siempre desde la óptica del deseo femenino.

Von Unwerth, de 69 años, fue modelo antes de fotógrafa de moda, y en 1989 firmó una de las campañas más icónicas de Guess, con Claudia Schiffer como protagonista. Esas imágenes en blanco y negro dispararon la carrera de la alemana, una de las supermodelos de los noventa, y en 2012 ambas repitieron colaboración para celebrar con otra sesión el 30 aniversario de la marca. «Siempre me ha encantado retratar a mujeres fuertes, juguetonas, seguras de sí mismas y que realmente son dueñas de su sexualidad», explicaba la fotógrafa a Dazed en 2018, coincidiendo con la inauguración de su exposición Ladyland, centrada en la mirada femenina sobre la mujer que ha defendido a lo largo de su carrera. «Pero no quiero cosificar a las mujeres ni presentarlas únicamente bajo una luz sexy. Quiero ver todas sus facetas. Todas las aristas de las mujeres», añadía.

Paltrow ha presentado en este número especial belleza de Bustle su última aventura empresarial: good.clean.goop. Se trata de una nueva línea económica (con precios por debajo de los 40 dólares) de productos básicos de belleza y bienestar que a partir del 22 de octubre se venderá a través de Target y Amazon. Paltrow creó Goop en 2008, y desde aquel momento su compañía no ha dejado de evolucionar (y sumar polémicas, con productos como sus velas con olor a vagina y la promoción de ideas amparadas en seudociencias). Nació como una empresa centrada en el bienestar y el estilo de vida y ha acabado convirtiéndose en un emporio en el que destaca su línea de belleza de lujo, Goop Beauty. Ahora, en un giro de guion, la empresaria ha apostado por democratizar sus productos con esta línea. «Good.clean.goop es para una persona que comprende los peligros de los productos convencionales, alguien que se centra en el bienestar. Creo que desde una perspectiva de valores y de estilo de vida, probablemente sean similares [a alguien que podría comprar Goop Beauty]. Lo que pasa es que la línea es más asequible», explica en la entrevista de Bustle.

Durante su conversación con Emma Rosenblum la actriz y empresaria reflexiona sobre la edad y la importancia de sentirse bien con una misma conforme pasan las décadas. Recuerda que le costó asumir el hito de cumplir 40 años, pero que el paso a los 50 fue mucho mejor y que ahora, con 51, se encuentra en un gran momento: [al cumplir 50] «me preocupaba sentir mucho dolor o miedo porque recuerdo que cuando cumplí 40 años… realmente me enloquecí. No sentí eso en absoluto a los 50. Pensé: ‘Amo a mis amigos. Amo a mi marido. Amo a mis hijos. Sí, mi trabajo es duro. Pero todo es bueno’. Pensé: ‘Me importa una mierda digan de mí, lo que piensen de mí, esta es quien soy. Al cumplir 50 profundicé en mí. Y, aparentemente, eso sigue mejorando».

En las imágenes que acompañan a la entrevista Paltrow juega con poses en espejos y mira directamente al objetivo de Von Unwerth. Se muestra divertida y segura en esta etapa de su vida y de su carrera. Y transmite esa idea también en la entrevista, donde critica las presiones sociales que recaen sobre la mujer: «Nosotras, como mujeres, estamos muy programadas para estar siempre ocupadas. Es como un logro, y todas hemos caído en ese anzuelo del patriarcado de que tenemos que estar ocupadas y tener un rendimiento superior. Me gustaría pasar a la siguiente fase desde un lugar de descubrimiento y gentileza. Dejar que la vida fluya en vez de decir ‘no hago lo suficiente». Todo lo contrario que hace una década, como recuerda en la entrevista: «Al cumplir 40 empecé a notar las patas de gallo, otras cosas… Hasta que no vi eso pensaba que no lo iba a tener, crees que vas a ser impermeable y que eso le preocupa innecesariamente a otra gente. Y en ese momento dices: ‘Dios mío, mi cara’. Hago un ejercicio constante de aceptar dónde estoy y la parte dolorosa de no ser joven y hermosa. Me digo que esto tiene que suceder, que esto está bien».