‘Ciao’, pantalón: seis tendencias que condecoran a la falda como la prenda del momento

La inercia del mal tiempo que arranca con el otoño suele relegar a la falda a un segundo lugar, en favor de vaqueros y pantalones de toda índole como fondo de armario. Además, no suele ser una prenda fácil de combinar cuando el termómetro cae en picado; implica un juego de capas complejo y cierta maestría en el proceso.

Esta temporada, sin embargo, multitud de diseñadores y firmas de costura acogen su versatilidad casi como un gesto político con infinidad de propuestas, tantas como nombres propios congregan las cuatro principales Semanas de la Moda del mundo. Una avalancha de alturas, tonalidades y texturas que ponen en jaque esa máxima que el modisto Christian Dior sentencia a menudo: “No hay nada más elegante que una falda y un suéter negro con un collar de brillantes”.

Este 0I 2025, el comodín del negro se deja a buen recaudo para abrazar épocas y estilos tan variopintos que lo más complicado será defender un único diseño. Por ello, desgranamos seis de las tendencias más sorprendentes que propone la pasarela para hacer de esta prenda un básico contemporáneo.

1. La zíngara

Tras el adiós de Demna de maison Balenciaga y la crisis palpable que atraviesa la streetwear, el boho chic se abre a pasos agigantados para defender una silueta mucho más romántica, etérea y fluida. Amiga de transparencias, paneles y volantes, esta falda ya hizo su incursión en el verano para allanar el terreno en los meses fríos junto a tejidos más nobles como organzas, seda o tafetán. Bien en forma de pareo (Giorgio Armani) o como quintaesencia de la estética corsaria de Chloé, es la prenda definitiva del invierno junto a bailarinas y tops de terciopelo.

Bimba Y Lola

Antik Batik

Indi&Cold

2. Con aberturas

El ‘tijeretazo’ es el recurso creativo de la temporada para elevar la falda a prenda de experimentación. Una herramienta que permite jugar con alturas y dimensiones, aportar movimiento (incluso en cortas distancias) y abrazar otra silueta clave del otoño: la falda pantalón. Y a todo color.

Mango

Pucci

3. La midi de piel

El cuero y versiones alternativas con efecto piel, transforman esta textura luminosa y fría en el básico indiscutible de esta estación. A ras de la rodilla o con la licencia de unos centímetros menos en manos de Miu Miu, vibra en colores muy de esta estación como el mostaza, teja, rojo o gris, dibujando una silueta en A o bien ajustada tipo lápiz.

Sfera

H&M

4. La silueta globo

El regreso de la minifalda este 2025 debe su fundamento -en parte- a esta silueta de llamativo vuelo que sorteó a menudo nuestra infancia. Heredera de la línea globo que confeccionó Cristóbal Balenciaga a comienzo de los años cincuenta, su vuelta a la palestra siete décadas responde a unas mínimas dimensiones con un guiño al babydoll y la estética pop de los noventa. Fiel aliada de fruncidos, pliegues y plisados volumétrico, pone a nuestra cintura en el centro absoluto de nuestra vestimenta.

Arket

Maje

5. Metalizadas

El oro, la plata y demás elementos preciosos salen de la nocturnidad para penetrar en estilismos diurnos con nota. En sets de falda lápiz y prendas con peplum (Balmain), acolchadas y vanguardistas (Alainpaul) o de calado retro (Versace), está claro que las faldas metalizadas han venido para quedarse.

Rotate

Rabanne

6. Asimétricas

Es la gran revelación de la temporada. Gracias a una pronunciada cola en el mismo tejido, este potente diseño permite disfrutar de la elegancia de una maxifalda y la sensualidad del formato mini en un solo gesto. Además del estrecho vínculo que mantiene con los cuadros tartán desde el pasado invierno, el cuero de efecto sixties que propone Courrèges define su perfecta anatomía.

Pull&Bear

Bottega y Veneta