El vestido de Lalachus en las Campanadas: un diseño de lentejuelas con escote ‘bardot’ creado en Ponferrada
Hablamos con Silvia Fernández, la diseñadora especializada en el sector nupcial que ha creado el vestido que ha lucido la humorista en las campanadas de Nochevieja en TVE
Si el vestido de Cristina Pedroche lleva copando los titulares y atención mediática de los últimos diez comienzos de año, este 2025 empezaba con la mirada puesta en el que Laura Yustres, más conocida como Lalachus, elegía para estrenarse como presentadora de las campanadas. La humorista y colaboradora de La revuelta era la encargada de dar la bienvenida al año nuevo en La 1 junto a David Broncano y, para la ocasión, confió en la moda nacional apostando por un diseño realizado a medida por la diseñadora Silvia Fernández. La ponferradina, al frente de su marca homónima conocida por sus diseños nupciales y sus vestidos para ocasiones festivas, ideó para ella y en “tiempo récord” un vestido largo cuajado de lentejuelas con el que Lalachus reafirmó el brillo propio en la noche más chispeante del año.
La parte superior del diseño estaba protagonizada por un escote bardot, que dejaba al descubierto sus hombros, y un bustier interior que creaba una semitransparencia, mientras que la falda, de corte evasé, llamaba la atención por la abertura lateral y una impresionante sobrecola. Un patrón que la marca ha creado en exclusiva para la presentadora y en el que se han empleado 15 metros de un tejido hecho a mano y el saber hacer de otras 15 personas durante las tres semanas que ha durado el proceso de diseño y confección.
La estilista de Televisión Española, Silvia Gago, ha trabajado mano a mano junto a la diseñadora en un look cuyo punto de partida era que fuera Made in Spain, motivo por el que el vestido se combinó con complementos de firmas españolas. Un toque de verde jade, símbolo de esperanza y crecimiento, fue la otra premisa. Este tono, mezclado con granate –uno de los colores que han definido 2024– y rosa empolvado, han sido los protagonistas de una creación ideada en Ponferrada y ejecutada en el taller que la marca regenta en la madrileña calle Almirante, donde se realizaron las cuatro pruebas. “Para Televisión Española era importante que el look tuviese los valores que ellos querían infundir a las campanadas, que fuese elegante. Año Nuevo es una noche de fiesta, pero no quisimos que perdiese clase. Además, Laura es una chica muy joven y también quiso ponerle su rock and roll”, adelanta la diseñadora al otro lado del teléfono horas antes de que se desvele una de las creaciones más relevantes de su carrera. El resultado es un diseño que atiende los citados requisitos al tiempo que cumple el principal objetivo de su creadora: “Para mí el vestido perfecto para ella era uno con el que se sintiese guapa. Y, aunque está mal que yo lo diga, está espectacular”, concede.
La participación de la cómica en la bienvenida al nuevo año de La 1, tomando así el testigo de Ramón García y Ana Mena con respecto al pasado curso, estuvo rodeada de polémica por la oleada de críticas que recibió la fuenlabreña de 34 años, la mayoría vinculados a su físico. Los ataques fueron tan furibundos que el mismísimo presidente de RTVE, José Pablo López, quiso pronunciarse al respecto en la red social X, asegurando que las críticas contra ella no eran producto de la gordofobia sino de la misoginia. “¿Alguien recuerda alguna crítica por su peso contra Alberto Chicote o contra Ibai Llanos cuando presentan las campanadas? Tanto por avanzar. Puro machismo”. Figuras de la primera línea política como la vicepresidenta Yolanda Díaz o la eurodiputada Irene Montero se sumaron a las muestras de aliento. Días después, la propia Lalachus salió al paso desde el escenario de La revuelta mostrándose sorprendida por la atención que su peso había despertado a nivel mediático y asegurando que ninguna crítica iba a amargarle su momento. “No hay ni habrá nadie, nadie, en el santo mundo y en el universo que pueda quitarme un mínimo de ilusión por estar presentando con este señor las campanadas de Televisión Española”, alegó junto a Broncano.
“Las críticas no han afectado a Laura en ningún momento del proceso de diseño”, ratifica la diseñadora Silvia Fernández a S Moda. “Nunca la he visto intimidada por el acoso y las cosas que se han llegado a decir de su físico. Es muy profesional y buscaba un vestido con el que estuviese cómoda para poder trabajar a gusto. Es una mujer que se siente segura del cuerpo que tiene”, añade. La ponferradina, que asegura estar acostumbrada a vestir a clientas, especialmente novias e invitadas, con todo tipo de hechuras y siluetas, defiende que una prenda bien confeccionada debe sentar bien tanto en una talla 36 como en una 46 o una 56. “La belleza de una mujer no tiene que ver con la talla, tiene que ver con su luz interior. Cuando una persona no es buena no brilla, da igual lo maravilloso que sea el vestido. Y Lalachus tiene mucha luz interior”.
A pesar de ser rivales en la noche televisiva, Cristina Pedroche quiso mostrar su apoyo a Yustres calificándola como “una mujer brillante, supersegura de sí misma y que lo hace estupendamente”. En declaraciones a la revista ¡Hola!, aseguró que “defendía a Lalachus y a cualquier otra mujer” que hubiera sido elegida para presentar las campanadas. “Cuando llegan estas fechas, da igual quién presente, siempre se critica. Desde Ana Obregón hasta Anne Igartiburu. El problema no es si una tiene un cuerpo u otro, el verdadero problema es la misoginia”, ratificó la presentadora vallecana. Su marido y padre de su hija, el cocinero Dabiz Muñoz, también aprovechó su visita a La revuelta para denominar como “deleznable y vomitiva” la ráfaga de odio e insultos que han experimentado tanto Lalachus como Pedroche.
Para crear el diseño de Yustres, el punto de partida y la principal inspiración fueron la propia protagonista. La diseñadora estudió a conciencia el perfil de Instagram de la cómica para empaparse de sus gustos y apariciones en alfombras rojas y repasó sus programas y podcast para conocerla más allá de su faceta estilística. “Le decía a mi marido que se estaba convirtiendo en alguien de la familia porque me levantaba y me acostaba pensando en ella”, recuerda entre risas. Desde la primera toma de contacto entre ambas a través de una llamada telefónica el entendimiento entre diseñadora y presentadora fue fluido. “Le pedí que tuviese confianza en mí porque yo iba a decirle la verdad”, concluye Fernández, convencida de que la humorista será “la gran protagonista” de la noche.
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