La moda es un mundo de zorros

Bienvenidos a la guarida del zorro. Así saluda este verano, y también lo hará el próximo invierno, el mundo de la moda. ¿Qué ha ocurrido para que la silueta de este sigiloso animal haya desplazado al estampado de leopardo, cebra o jirafa? El escritor neoyorquino Pascale Legagneur considera que estas especies se «devoran las unas a las otras», según la temporada. Él también justifica la atracción de creadores y consumidores por estos tejidos: «Que estas pieles, o su versión estampada, sobrevivan a las tendencias tiene una razón histórica. En el Antiguo Egipto se reservaban a sacerdotes, más tarde fueron adoptadas por la aristocracia y finalmente se instalaron entre la alta sociedad. Su uso representa estatus». Aunque otros consideran que el mamífero atrae porque «nos conecta con patrones encerrados en nuestro ADN que se remontan a una época en la que se atesoraba su piel por su calidez», explica Dawnja Burris, de Animal Collectivism en Nueva York.

Camiseta estampada de Uniforms for the Dedicated.

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«Es el símbolo de la elegancia y el refinamiento», nos cuentan los franceses Lucie Thomas y Thibault Zimmermann o Zim & Zou, su nombre artístico. Ellos firman la última apuesta de Hermès por el arte: una instalación en el escaparate de su boutique en Barcelona que es un apartamento exclusivo –inspirado en la película Fantastic Mr. Fox de Wes Anderson (2009)– para un zorro hecho con hojas de papel. «En él empleamos un mes de trabajo», comentan Zim & Zou. Como el bolso Kelly o Birkin, elastuto que lo habita también es de cuero. «Trabajamos en el animal dos semanas. No sabíamos si sería macho o hembra hasta que no finalizamos la cara, ahí decidimos que era macho», nos cuentan.

Souvenir Gallery creó este cojín con terciopelo vintage.

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Alexander McQueen también lo ha incorporado en sus vestidos para el próximo otoño-invierno con estampados hiperrealistas. El resto de la industria ha decidido dejarlo pasear a sus anchas, pero en su versión más infantil, como si de un héroe para una fábula de adultos se tratase. Un ejemplo son las capas de Dolce & Gabbana, las faldas de See by Chloé o los gorros de lana y pelo de Fendi. Pero también conquista las colecciones de casas más urbanas, como las de los suecos Uniforms for the Dedicated, los australianos We Are Handsome o los franceses Kitsuné (zorro en japonés), que lo estampan en sus líneas de ropa y accesorios: «Nuestra marca se mueve intrépida entre la moda y la música [tienen un sello discográfico en el que trabajan Two Door Cinema Club o Hot Chip], de ahí que nos identifiquemos con este mamífero y sea nuestro logo».

Walking Chair ha fabricado con papel reciclado sus lámparas Fox.

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También le ha dado un zarpazo al diseño industrial y ha desterrado al gato, que ya es cosa de 2013. Walking Chair lo convierte en lámpara; Bongo Design lo ha transformado en escultura e Imm living y Souvenir Gallery han capturado su estilizada silueta en menaje. Divertida forma de lograr que nuestras casas pasen de ser nido a madriguera.

Bañador de la última colección de We are handsome.

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Gorro de cachemir teñido y pelo de la colección otoño-invierno 2014/2015 de Fendi.

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