La de ‘Friends’ es la nueva camiseta de los Ramones

Ahí está. Escondida entre un tropel de camisetas con mensajes feministas, un buen surtido de prendas de grupos de rock y otras tantas básicas adornadas con mensajes como «influencer» o «bloguera» aparece la inesperada prenda de la temporada. La mítica serie Friends invade las tiendas low cost en forma de camiseta de manga corta, sudadera e incluso pijama. Un paseo por las nuevas colecciones de Mango, Stradivarius, Urban Outfiters o Topshop demuestra que coinciden en encumbrar a la sitcom más famosa de todos los tiempos como última manifestación de la nostalgia noventera en el mundo de la moda.

Mientras que las celebrities sirvieron de inspiración al universo fast fashion para producir sin parar prendas de los Ramones, The Rolling Stones o Metallica, el revival de Friends resulta menos orquestado y mucho más imprevisto. Los motivos para recuperar la icónica tipografía de la serie pueden obedecer a varias razones: a) el merchandising de grupos, películas y series se plantea como un imprescindible en el presente y futuro de las marcas, b) Friends es uno de los pocos símbolos de la cultura pop que faltaba por convertirse en carne de moda pronta, c) ¿quién no se siente identificado con la serie y sigue revisionando, una y otra vez, sus capítulos 20 años después de su estreno? La serie es la más popular de los programas coetáneos y los números lo demuestran: mientras que en Etsy es posible hacerse con 131 productos de Melrose Place, son más de 2.800 los objetos de Friends que están a la venta. Parecen motivos suficientes para imprimir las siete letras más famosas de la televisión sobre fondo neutro y comercializarlas a precios competitivos.

El verano pasado ya aparecieron un par de modelos en la colección de Pull & Bear. Y firmas como Primark y Forever 21 también han tirado del fandom Friends vendiendo sendas camisetas. Pero es ahora cuando la serie se convierte en plaga en las colecciones otoño-invierno de las principales tiendas. No deja de resultar llamativo que, este tipo de prendas dirigidas principalmente a un público muy joven, recuperen una serie que se estrenó cuando sus potenciales clientes aún no habían nacido. Pero, ¿acaso esas adolescentes que lucen con orgullo el logo de Pink Floyd o Joy Division han escuchado sus canciones? Parece incluso mucho más probable que las futuras compradoras de la camiseta de Friends sigan las aventuras de Rachel o Ross a través de Netflix a que memoricen las letras de Led Zeppelin en plena era trap.

Pero aunque nuevos espectadores se enganchen a una serie de los 90 a pesar de la inmensa oferta televisiva actual, Jennifer Aniston tiene sus dudas acerca de si la ficción hubiera funcionado en plena era smartphone. «Estuvimos bromeando sobre lo que pasaría si Friends se crease hoy: tendrías una cafetería llena de gente que solo mira su iPhone. No habría episodios o conversaciones reales», dijo la actriz en el programa de iHeartRadio de Ariana Huffington.

«Friends es víctima de su propio éxito y, más específicamente, de su ubicuidad», escribía la periodista Hadley Freeman en The Guardian en 2014, el año en el que se cumplían dos décadas del estreno de la serie. Una aceptación masiva que la convierte, para alegría de unos y pesar de los más puristas, en fuente de ingresos para toda clase de marcas. Sus personajes, que no tenían miedo a dar lecciones o mostrar sentimentalismos, conectaron muy bien con el público. «Solo los mejores programas de televisión logran que los espectadores se preocupen realmente por los personajes y Friends lo hizo», en palabras de Freeman. Por eso gana por goleada a series como Sensación de Vivir o Melrose Place a la hora de convertirse en camiseta-objeto de deseo para sus fans de toda la vida o los nuevos conversos. Que las generaciones del futuro se vayan preparando para una plaga de camisetas de Como conocí a vuestra madre ‘Made in’ Inditex.