Greta Gerwig, la musa ‘indie’ conquista Hollywood

“A sus 29 años, es más idealista que su amiga Lena Dunham, menos consciente de su vertiente transgresora que su progenitora Chloë Sevigny y sabe perfectamente que las comparaciones son odiosas. Su película, por otra parte, es completamente excelente”. Así describe el diario The Guardian a Greta Gerwig. Y lo cierto es que a esta actriz y guionista le ha llegado la fama en el momento oportuno y por las razones adecuadas: en mitad del furor causado por 'Girls', apareció 'Frances Ha', una cinta que, como la obra magna de Dunham, va de amigas para siempre y del paso tardío a la edad adulta, pero que resulta mucho menos autoconsciente que la serie de la HBO.

Rodada en blanco y negro, con un bajísimo presupuesto y una estética entre el documental y el vídeo casero, la película tiene todas las credenciales para convertirse en esa obra de culto que rellena las listas de lo mejor del año. Lo que pocos esperaban es que, gracias a ella, Gerwig llegara a colarse en las nominaciones a mejor actriz en los Globos de Oro (la película se estrenará en España, por fin, a principios de 2014 gracias a Avalon). Apodada “La Meryl Streep del Mumblecore”, ese género cinematográfico que utiliza logística casera para narrar tramas de veinteañeros con diálogos realistas, ahora Gerwig puede decir que comparte nominación con la veterana actriz.

Una de las escenas de ‘Frances Ha’

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Estudió filosofía mientras montaba grupos de teatro y escribía guiones. Creó historias de tinte generacional que se convirtieron en películas muy independientes protagonizadas por ella misma ('Hannah takes the stairs', 'Nights and Weekends') hasta que en 2010 el guionista y director Noah Baumbach, su actual pareja, se cruzó en su camino. Rodaron 'Greenberg', con Ben Stiller en el papel de treintañero inadaptado,y muchos calificaron la cinta como un intento de llevar el mumblecore al mainstream. La película no obtuvo el éxito esperado, pero la industria ya le había echado el ojo.

Protagonizó 'Damiselas en apuros' junto a Adam Brody, apareció en 'A Roma con Amor' (en el anuario del instituto escribió que su sueño era rodar con Woody Allen) y se embarcó en ese proyecto tristemente cancelado que consistía en convertir la novela de Franzen, 'Las Correcciones', en una serie de la HBO dirigida por Baumbach y protagonizada por Ewan McGregor y por ella misma. Cuando se estrenó 'Frances Ha', Gerwig ya era una actriz semiconocida, pero sobre todo, era el nuevo blanco de las marcas de moda.

Junto a Ben Stiller y Rhys Ifans en ‘Greenberg’

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La pasada primavera, fue imagen de la campaña de Band of Outsiders, la firma californiana favorita del indie americano. Su creador, Scott Sternberg, la nombró su musa oficial cuando apareció junto a ella en los últimos premios CFDA y, tratándose de alguien cuyo olfato le ha llevado a aliarse con Jason Schwartzman, Devendra Banhart o Rashida Jones, no es de extrañar que los medios comenzaran a catalogarla como la nueva itgirl del indie. Gerwig confesaba entonces que no era una chica de alfombra roja, y que le asustaba el escrutinio que suele conllevar este tipo de eventos. Por eso contrató a Erin Walsh, la estilista de Kerry Washington y Kristen Wiig, y se dejó asesorar, consciente de que ahora cualquier prenda que luciera iba a ser instantáneamente juzgada.

Greta Gerwig apareció en la gala de los premios CFDA junto a Scott Sternberg, creador de la firma Band of Outsiders

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El primer trabajo de Walsh fue vestirla en la última gala del MET. No se puede decir que Gerwig se ciñera totalmente al espíritu punk de la noche, pero supo elegir la marca que le convenía a su estatus de musa del cine independiente: un vestido negro de Saint Laurent Paris, ahora que la firma, bajo el mando de Hedi Slimane, quiere asociarse con los nuevos valores de la música y el cine. Con estas credenciales, a nadie le extrañó que Spike Jonze la eligiera un par de meses después para protagonizar el curioso vídeo que acompañó a la actuación de Arcade Fire en los Youtube Music Awards.

Sin embargo, si por algo destaca Gerwig -y quizá por ello se haya convertido en chica de portada- es por parecer alguien completamente natural, ajeno al glamour de las galas y los vestidos de Alta Costura. Su apariencia sofisticada recuerda en cierta medida a las actrices de cine clásico, pero su actitud tiene, en cierta medida, la espontaneidad de las películas que escribe e interpreta.

Ahora lleva vestidos de lujo y se sienta en la primera fila de los desfiles, pero confiesa que lo único bueno de ser la nueva favorita de la industria es que “por fin los diseñadores le regalan vestidos de su talla”. Mientras tanto, rueda el nuevo proyecto de la directora francesa Mia Hansen Love y prepara una nueva historia con Noah Baumbach. Por lo pronto, su interpretación de Frances Ha ha convencido al mismo jurado que ha seleccionado a Amy Adams y Meryl Streep. Y, aunque sea a su pesar, tendrá que enfrentarse a la alfombra roja de los Globos de Oro. Con permiso de los Oscar, la más observada del mundo.

Mickey Sumner, hija de Sting, comparte protagonismo con Gerwig en ‘Frances ha’

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