Enredarse con las palabras es tendencia
Aplicaciones como Apalabrados y Words with Friends y el Scrabble de toda la vida enganchan a millones de usuarios.
Lo último que esperábamos de un tipo como Alec Baldwin, perenne pre-candidato a la alcaldía de Nueva York, erudito en música clásica y respetado intérprete que está gestionando con certeza el segundo acto de su carrera, gracias a la serie Rockefeller Plaza y a películas como la próxima de Woody Allen, To Rome with love, es que hiciera un Melendi. Es decir, que le echaran de un avión por mal comportamiento. Al intérprete le expulsaron de un vuelo de American Airlines el pasado diciembre después de negarse a apagar el móvil y enfrentarse a una asistente de vuelo. Pero tenía una buena excusa: estaba en plena partida de Words with Friends, una especie de Scrabble en línea. “Ah, entonces se entiende”, pensarán los enganchados a Apalabrados, otra app para verbófilos que causa furor en España y que resulta extrañamente adictiva.
Alec Baldwin en el aeropuerto de Los Angeles.
Gtresonline
Los creadores de Apalabrados, de la empresa argentina Etermax, querían desarrollar una aplicación que no lo pareciese, un juego para gente que no suele jugar con el móvil. Y lo consiguieron, a juzgar del más de millón de descargas que consiguió en menos de tres meses y de la fiebre por el juego que se deja notar, por ejemplo, en Twitter, donde cada minuto se escribe un tweet sobre Apalabrados en algún lugar del mundo. Sus víctimas destacan aspectos como el chat que lleva asociado para explicar la adicción que padecen. Es decir, se juega mientras se comentan los avances en el canal paralelo. Además, plantea un reto a las mentes multitarea: permite mantener ocho o nueve partidas abiertas a la vez, con conocidos y desconocidos. Y desaparecen las clásicas discusiones sobre si, por ejemplo, “tweet” es o no es una palabra. Manda el diccionario. En este caso, los de los nueve idiomas en los que está disponible la aplicación: inglés, catalán, español, francés, alemán, italiano, holandés, sueco y portugués, con dos variantes, de Brasil, y de Portugal.
Desde hace unas semanas, el juego, que estaba disponible en el App Store y en Android Market, puede desarrollarse también en Facebook, donde ya se está convirtiendo en el nuevo Farmville. Curiosamente, el otro juego que arrasa en los smartphones es Draw Something. O sea…el Pictionary. Los clásicos se reciclan.
Fotograma de la película «Sabrina».
Gtresonline
Baldwin no es el único aficionado de perfil alto a los juegos con palabras. Robert Pattinson interrumpió una entrevista con el periódico USA Today para acabar una partida con un amigo; Jon Hamm y su novia, la directora de cine Jennifer Westfeldt, se han declarado fanáticos y la presentadora de informativos estadounidense Katie Couric retó a sus fans a ganarle al Words with Friends apostando dinero con el objetivo de recaudar fondos para la lucha contra el cáncer.
El Scrabble de toda la vida, que también tiene una muy adictiva versión online y comunidades de jugadores hispanohablantes como Redeletras.com, cuenta con sus propios fans. Si alguien tiene alguna duda sobre qué hacen por las noches Shakira y Gerard Piqué en su dúplex barcelonés, ellos mismos se la resuelven: juegan al Scrabble de Cayro The Games. El jugador del Barcelona y la cantante mantienen un pique bien aireado en las redes sociales. El pasado 28 de febrero, el futbolista colgaba una foto de su novia, muy compungida ante el tablero (¿no tendría vocales?) con el mensaje: “Le estoy ganando a alguien al Scrabble. ¡Mirad qué carita!”. Ella se vengaba un mes más tarde, subiendo a Twitter una imagen de su novio, con pinta de estar perdiendo al juego de mesa. Por lo que parece, la pareja juega en un tablero normal y corriente, como el que cualquiera puede tener abandonado en un altillo. Y no se han pasado todavía a las versiones de lujo, como el Scrabble para nerds del diseño que se lanzó recientemente y que viene en un cofre-caja muy Louis Vuitton. Los jugadores pueden customizarlo encargando fichas en su tipografía preferida.
Otro fan improbable del juego, el rapero Ludacris, mencionó el Scrabble en su canción Cry babies (oh no). La actriz Anne Hathaway, por su parte, se ha declarado un peligro y una obsesa del Scrabble (¿humblebrag?). De hecho, el New York Times decretó en un artículo que declararse fanático de los juegos de palabras va en camino de sobrepasar al clásico “yo era un nerd en el instituto” como frase poco creíble que los famosos pronuncian en las entrevistas para demostrar lo normales que son y a la vez quedar bien, ya que da una imagen de tener algo de materia gris.
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