Lo ha vuelto a hacer: Beyoncé copia a un artista sudafricano en su último videoclip

«Una carta de amor a África». Así definía Beyoncé The Lion King: the gift, el disco que hace las veces de banda sonora de la nueva película de El Rey León (aunque Queen B ha corrido con los gastos de producción) y que se publicó el pasado 19 de julio.

Lo cierto es que la cantante, aprovechando el tirón del Afrobeats (el género que combina música tradicional del oeste africano con melodías funk y jazz) en medio mundo, se ha aliado con varios artistas africanos para sacarlo adelante. «Gracias a Beyoncé se nos va a conocer mucho más. Ya estamos agotando conciertos», comenta uno de ellos, Tekno, en una entrevista a Billboard. Así que Beyoncé está libre de la acusación de apropiación cultural (al menos, esta vez) pero parece ser que no de la de plagio.

Su nuevo video clip, Spirit, está demasiado inspirado en La Maison Noir: the gift and the curse, un álbum visual creado por el artista sudafricano Petite Noir el año pasado. Como no podía ser de otra manera, la cuenta experta en detectar palgios, @dietprada, soltó la liebre publicando varias comparaciones entre ambos trabajos. La verdad es que, al cotejar ambos vídeos, se demuestra que hay ‘inspiración’ en casi cada plano.

No es la primera vez (ni la segunda, ni la tercera) que Beyoncé es acusada de plagio. Quizá el caso más sonado fue el del director Matthew Fulks, que acusó judicialmente a la cantante de haber copiado su cortometraje Palinoia para uno de los clips de Lemonade. Otro de los vídeos del album, Hold Up, estaba también ‘fuertemente inspirado’ por la videoartista suiza Pipilotti Rist.

Antes, en 2011, tomó prestado el clip Rosas danst Rosas, de la coreógrafa Teresa de De Keersmaeker, para crear el suyo propio, Countdown.

En este último caso, ni el aludido Petite Noir ni nadie de su equipo se ha pronunciado sobre el supuesto plagio. Mucho menos Beyoncé. Lo curioso es que, hace cinco años, petite Noir concedió una entrevista a Dazed en la que decía: «Nuestra música, la noirwave, va a ser el nuevo pop. Pronto gente como Beyoncé o Future van a estar cantándola». Razón no le faltaba.