Andie MacDowell sobre el revuelo frente a su melena canosa: «Mis canas son una demostración de poder»
«Creo que la edad en mi cara, para mí, ya no coincidía con mi pelo. De alguna manera, siento que parezco más joven ahora porque se ve más natural. No es como si estuviera tratando de ocultar algo». La intérprete que revolucionó con su melena Cannes defiende sus canas en una entrevista.
Andie MacDowell entiende el revuelo que las fotos de su melena canosa provocaron al dejarse ver en la alfombra roja de Annette en el festival de cine Cannes hace unos días. Como muchísimas otras mujeres, se las empezó a dejar en la cuarentena. A sus 63 años, la actriz que conquistó a Hugh Grant en Cuatro bodas y un funeral allá por 1994 tenía dudas de cómo sería recibida su nueva melena plateada y hasta se planteó ponerse una peluca para «complacer a los demás» y que no fuese muy impactante ver su transición capilar. Así se lo ha contado a la edición estadounidense de Vogue en una entrevista en la que defiende que sus canas «son una demostración de poder».
Estos son varios de los titulares que la actriz ha ofrecido sobre por qué importa enseñar las canas sin miedo al qué diran.
En la cuarentena se obsesionó con las canas de Jane Fonda:
«Al comienzo de la cuarentena, mi cabello comenzó a crecer y cada vez que mis hijos me veían, me aseguraban que me quedaba estupendo el pelo gris. Me hacía un moño y parecía dos botes de sal y pimiento, negro y plateado. Me gusta compararme con George Clooney porque ¿por qué no? Durante mucho tiempo he pensado que ya era hora de que yo, personalmente, hiciera esa transición porque sentí que era apropiado para mi personalidad y para quien soy. Durante el encierro, tuve mucho tiempo libre y me obsesioné con Jack Martin, que peinaba a Jane Fonda. Compartí esas fotos de Jane con mucha gente y les decía: «Oye, quiero hacer esto».
Sus representantes no querían que se las dejara:
«Conseguí un trabajo y muy rápidamente tuve que decidirme sobre lo que iba a hacer. De hecho, mi manager me decía: «No es el momento». Yo me impuse: “Creo que estás equivocado, voy a ser más poderosa si acepto donde estoy ahora. Es el momento, porque en dos años voy a cumplir 65 años. Si no lo hago ahora, no tendré la oportunidad de ser sal y pimienta. ¡Siempre quise ser sal y pimienta!»
A pesar de tener el referente de Jane Fonda, no encontraba a mujeres famosas con esa melena:
«No podía encontrar referentes de melenas así de famosas en internet. Mi inspiración eran mujeres no famosas. Empecé a buscar en Instagram. Ya sabes cómo funcionan las redes sociales … una vez que empiezas a ver una cosa, aparecen automáticamente. Entonces, todas estas melenas en Instagram que se están volviendo plateadas, comencé a mirarlas. Estaba mirando a mujeres reales que estaban en transición a las canas, así como a mujeres más jóvenes en sus cincuenta que optaban por lo natural. Podías ver el antes y el después, y me gustan los después. ¡Pero todo el mundo tiene su gusto personal! Ese es mi gusto. Tengo dos hermanas mayores que yo y probablemente se teñirán el pelo para siempre. ¡Eso es lo que son!»
Sobre por qué lucir así su melena es un movimiento que desprende poder:
«Googleé a actores con el pelo sal y pimienta. ¡Hay muchos hombres que lo hacen! Uno de ellos contaba que cuando se veía a sí mismo con el cabello teñido, parecía que estaba tratando de verse más joven. Creo que eso es lo que me empezó a pasar. Creo que la edad en mi cara, para mí, en mi opinión personal, ya no coincidía con mi pelo. De alguna manera, siento que parezco más joven ahora porque se ve más natural. No es como si estuviera tratando de ocultar algo. Creo que es un movimiento, una demostración de poder, y eso es lo que les decía a mis managers. Es exactamente lo que necesito hacer ahora».
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