Consejos de limpieza que no preguntarías a tu madre
¿Han vomitado en tu bolso? ¿Cómo se limpian los vibradores? ¿Y las manchas de esperma del sofá? Jolie Kerr tiene la guía definitiva para solucionar los dramas de suciedad modernos.
Soluciones sin prejuicios y con alegría para los dramas de limpieza de los millennials. Jolie Kerr es la Martha Stewart de las nuevas generaciones. Una consejera digital de cabecera que en los últimos años, y a través de su columna semanal en Jezebel, The Hairpin y Deadspin, ha solucionado la vida a todos esos internautas que tienen que lidiar con manchas de vómito, esperma, pelos hasta en los rincones más insólitos de su hogar y otras asquerosidades varias lo suficientemente perjudiciales como para provocar más preguntas que respuestas si consultas a tu madre. Porque a todos nos gustaría ser un poco como Monica de Friends pero, sinceramente, nos parecemos más a Liz Lemon. Kerr llega dispuesta a solucionarte la vida sin morir googleando en el intento y ahora publica My boyfriend barfed in my handbag… and other things you can’t ask Martha (Mi novio vomitó en mi bolso… y otras cosas que no puedes preguntar a Martha, Penguin Books). Una guía práctica, y sobre todo divertídisima, para aprender algunos trucos infalibles, prácticos y baratos para mantener tu hogar como una patena (o, al menos, intentarlo).
Si alguien sabe cómo lidiar con momentos embarazosos, es ella. «Sería imposible recordar cuál ha sido la duda más estrambótica que me han planteado. Muchas son raras –aunque para nada me molestan, al menos a mí–. Cómo limpiar las manchas de semen del sofá es un clásico. También está la chica a la que sus amigos pintaron el culo con un rotulador permanente, y ella después manchó su lavabo al sentarse. Todas son encantadoras a su manera», relata. Procedamos entonces a realizar un breve resumen de algunos de los consejos y trucos que Kerr quiera que tengas en cuenta de cara a situaciones a enfrentarse:
Las consecuencias de creer que tu horno es un almacén
-¿Cómo limpiar los restos de un tupper que habías dejado allí (y no recordabas) y que se derritió al encender el horno?
Seamos honestos, es demasiado fácil olvidar que estaba allí. Le puede pasar a cualquiera. Aunque no está de más destacar que lo recomendable es que uses tu horno para cocinar y no como un armario, tienes dos opciones si te ves en una emboscada de humo negro y tóxico conquistando tu casa:
1) Ruta fría: Poner hielo en una bolsa y situarla donde el plástico se había derretido. Cuando se enfríe, prepárate para rascar los restos con un raspador fino y afilado.
2) Ruta caliente: Para evitar humaredas innecesarias y tóxicas, pon la temperatura más baja del horno y espera a que el plástico se derrita. Cuando se seque, harás músculo al quitarlo con un raspador. Después puedes utilizar un secador de pelo para retirar todos los restos.
Las consecuencias de una rave casera salvaje (el día después)
A) Te levantas y descubres que sí, que alguien decidió vomitar en tu pared de gotelé durante tu guateque casero. En este caso, olvida mojar papel de cocina para limpiarlo (lo dejarás todo lleno de grumos) y opta por un trapo robusto. Utiliza jabón de fregar los platos y si la mancha es obstinada, un poco de lejía. Los borradores mágicos también te ayudarán, por algo son mágicos.
B) Te levantas y compruebas aliviada que no hay rastros de vómito, pero sí que tienes tatuado a tu suelo una mezcla de confeti con alcohol reseco con pinta de teñir de arcoiris allá por donde pises. Mantén la calma, el amoníaco y el jabón de fregar serán tus mejores aliados. Mezcla una cuarta parte de amoníaco con dos cucharadas de jabón de fregar los platos y varios vasos de agua. Muévelo hasta que haga espuma. Utiliza la mezcla para limpiarlo con un estropajo. También puedes recurrir al alcohol etílico, humedecer un trapo y limpiar con movimientos circulares. Si el confeti ha desteñido, puedes mezclar oxiclean con agua y así evitar dañar tu suelo.
Cómo quitar las manchas de semen (o fluidos vaginales) del sofá
(Aviso para navegantes, las manchas de las sábanas es mejor limpiarlas antes de que, ejem, solidifiquen, porque no vas a querer usar lejía en ese juego precioso estampado de algodón egipcio que tanto te costó comprar). Si has tenido una jornada interesante en tu salón, Kerr te recomienda seguir los siguientes pasos:
–Un producto que no falla para el sofá: el limpialfombras y tapicerías de sofá con cepillo incluido de Omino Bianco (magia instantánea). Si no lo tienes, será un proceso arduo, pero lo conseguirás. Oxiclean viene al rescate. Como estás lidiando con un tapizado, intenta no saturarlo de agua. Mezlca el Oxiclean con un poco de agua caliente para que se disuelva mejor. Coge un paño humedo (no lo dejes en remojo, con un poco ya te sirve), aplica la mezcla sobre la tela. No queremos que se quede allí mucho rato, así que seca suavemente la mancha frotando el tejido. Cuando acabes, utiliza un secador de pelo para acabar con cualquier rastro de humedad. Después, pasa el aspirador con el accesorio del cepillo. Así la tela volverá a su estado natural, sin mancha tórrida de por medio. Otra opción, menos económica, es recurrir a un limpiador de vapor.
Cómo limpiar tus vibradores
Como no todos los juguetes sexuales son iguales ni están hechos del mismo material, lo mejor es preguntar cuando los compres. Si eres vergonzosa y no te apetece comentarlo con el/la dependienta, mira en las instrucciones. Consejos de Jolie Kerr antes de proceder a limpiar a tus aliados personales:
1) No utilices nada para limpiar tu juguete con algo que jamás usarías para (el interior de) tu propio cuerpo. Eso descarta al alcohol etílico, lejías u otros componentes químicos dañinos.
2) Asegura que tu juguete está seco antes de volver a guardarlo.
3) Si el consolador no es motorizado, mételo en el lavavajillas (en la bandeja superior), pero sin pastilla de jabón. La combinación de agua caliente y vapor será suficiente.
4) Usa un condón para limpiarlo, en caso de duda.
5) En la tienda donde lo compraste encontrarás limpiadores específicos.
Vistas las prerecomendaciones, aquí van los consejos en función de los materiales:
-Silicona/ Cristal pirex/Acero inoxidable (para juguetes sin motor): jabón y agua hirviendo. Sumérgelo en agua hirviendo entre 8 y 10 minutos.
-Silicona/Cristal Pirex/ Acero inoxidable (con motor): jabón y agua. No lo sumerjas. Utiliza un trapo para limpiarlo y listo.
No solo de esperma y vómito vive el libro de Kerr (por cierto, para limpiar tu bolso lo mejor es jabón de cuero y desodorante de pies en caso de vomitona accidental). En él, encontrarás consejos muy prácticos para limpiar a fondo tu cocina, el baño o librarte de los pelos que asolan tu casa. Las dudas embarazosas, no obstante, son las más divertidas y desternillantes.
¿Por qué nos cuesta preguntar esto a nuestras madres? «No es una cosa de esta generación, soy más mayor que la mayoría de mis lectores (Kerr tiene 37 años) y te aseguro que no llamaría a mi madre para preguntarle cómo quitar las manchas de semen de las sábanas. Pero creo que mis lectores se sienten cómodos preguntando este tipo de dudas de las que no me reiré o por las que no les juzgaré. De hecho, ¡ADORO que me hagan estas preguntas! Me siento muy honrada por la confianza que me tienen, y creo que sus historias son entrañables. Me encanta ayudar a la gente que siente que vuelven a controlar sus vidas más de lo que lo hacían antes de llegar a mí», cuenta. Ya sabes, ante la duda consulta Ask a clean person (Pregunta a una persona limpia, su columna virtual) o cómprate su libro. No hay nada de que avergonzarse (aunque nunca se lo contarías a tu madre).
Portada del libro de Jolie Kerr.
Plume/Penguin Books
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