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Mitos y verdades sobre cómo limpiar la vulva para mantenerla saludable

Todo sobre lo que siempre quiso saber sobre la higiene íntima femenina, contestado por expertos

Vulva
Tanja Ivanova (Getty Images)

Gywneth Paltrow, experta en hacer de la vagina un talismán de ventas, nos hizo creer durante un tiempo que las saunas vaginales tenían que formar parte de nuestra rutina de cuidados íntimos. Cuando los expertos se echaron las manos a la cabeza ante las recomendaciones de la creadora de GOOP y nos hicieron saber que en sus palabras había más intención de generar titulares que respaldo científico, el mercado de la higiene femenina se disparó. Aparecieron infinidad de marcas que se centran atraer a mileniales y a la Generación Z haciendo uso no solo de nombres sugerentes, sino de atractivos diseños destinados a que los productos que antaño eran tabú ya no se escondan en el fondo del cajón, sino que se exhiban con orgullo en el baño. Sí, el cuidado íntimo toma ahora el lugar de los productos de belleza en los denominados #shelfies (las fotografías en las que se muestran los aliados cosméticos, normalmente bañados de filtros y colores instagrameables). La agencia líder en el pronóstico de tendencias de consumo WGSN asegura que la industria de la salud íntima estará valorada en 38.000 millones de dólares para 2026, y por eso las marcas no solo se preocupan de su formulación, sino de su packaging, para que comprar un gel especializado, lejos de ser algo que esconder, sea algo de lo que incluso presumir.

Qué productos usar y cómo limpiar la vulva

Aunque en más de una ocasión alguien alza la voz en contra del uso de determinados productos específicos para la higiene íntima de las mujeres, lo cierto es que hay que tener en cuenta que se trate de productos diseñados para la zona íntima y que mantengan el ph vulvar adecuado para la edad de la mujer que la utiliza. “No es lo mismo una niña, una mujer en menopausia o una en edad fértil. El ph vaginal va cambiando, y tenemos que recordar que todo lo que hagamos en la vulva puede alterar el equilibrio dentro de la vagina. Por ello hay que elegir toallitas, limpiadores o geles vulvares que mantengan el ph adecuado para la edad de la mujer”, aclara Maite Fernández, experta en ginecología funcional y cirugía vulvar y Embajadora en España de LELO. Por su parte Diana Montesinos, fundadora de Pansy, marca de geles y aceite cuya finalidad es normalizar el cuidado íntimo, asegura que lo principal para decantarse por el producto idóneo es que sea respetuoso con el cuerpo, pues influye directamente en nuestro bienestar. “Tiene que estar formulado con ingredientes naturales, de calidad y que respeten la barrera natural externa de nuestra zona íntima.

En realidad, los productos de higiene íntima propician un extra de bienestar y comodidad en una de las zonas más sensibles de nuestro cuerpo. Existe realmente una diferencia tangible entre utilizarlos o no”, asegura. “Estos productos se aplican en la zona genital externa. La vagina tiene su propio mecanismo de limpieza a través del flujo, y la limpieza de la zona debe limitarse al exterior, es decir, a la vulva”, dice Montesinos.

“Una excesiva higiene vulvar puede provocar que se altere la flora vaginal, porque se pierden también las bacterias que están en la entrada de la vagina. Uno de los grandes mitos es que hay que lavarse mucho: con una vez al día es suficiente”, señala Fernández. “El paso a paso ideal para lavar la vulva es hacerlo una vez al día con un gel íntimo, preferiblemente adecuado a la edad de la mujer, y después aplicar una crema hidratante, sobre todo en las mujeres depiladas. Es importante también usar braguitas de algodón y evitar o no utilizar salvaslip, ya que altera también la flora vaginal”, explica a S Moda.

Como podemos observar, la limpieza de la vulva siempre ha estado rodeada de mitos, y la doctora Marta Sánchez-Dehesa, Directora de HM IMI Toledo y jefa del equipo de ginecología, repasa algunos de ellos. “Las duchas vaginales no son necesarias y pueden interferir con el equilibrio natural de bacterias en la vagina, lo que aumenta el riesgo de infecciones. Hay que evitar los productos perfumados para limpiar la vagina, pues pueden irritar la piel y alterar el pH natural de la vagina, lo que aumenta el riesgo de infecciones. Un mito habitual es la creencia de que hay que limpiar el interior de la vagina, pues es capaz de limpiarse a sí misma de forma natural, por lo que no es necesario limpiar el interior de la vagina con ningún tipo de producto”, señala.

Ni spas, ni remedios rápidos

Por más que Paltrow se haya lucrado hasta la saciedad vendiendo la idea de que la vulva (ella solo emplea la palabra vagina, pero este no es el momento de echarle en cara la inexactitud del léxico empleado) requiere infinidad de carísimos y complicados cuidados, las expertas en la materia ahondan en lo sencillo que es tener una higiene óptima. “Es un procedimiento controvertido y consiste en sentarse sobre una silla que contiene un recipiente con agua caliente y hierbas medicinales. El vapor resultante se supone que entra en la vagina y el útero, con el propósito de limpieza. Esta técnica no está respaldada por una evidencia científica sólida e incluso pueden representar riesgos como quemaduras, irritación o desequilibrios en la flora vaginal”, advierte la Dra. Marta Sánchez-Dehesa.

Por su parte, la Dra. Bárbara Fernández del Bas, especialista en Ginecología y Medicina de la Longevidad de Longevity Hub by Clinique la Prairie Madrid, indica que los genitales femeninos tienen un ph muy específico que, ante cualquier cambio, se modifica y al hacerlo, puede modificar la microbiota vaginal y generar infecciones. “Por eso sugiero a mis pacientes evitar cualquier tipo de ducha vaginal, y ante la aparición de flujo de características o cantidad diferentes a las habituales, o ante la aparición de algún síntoma como ardor y/u prurito, acudan lo antes posible a su ginecólogo y que procuren no autotratarse. Muchas veces, por motivos de tiempo, vamos a la farmacia a por algún remedio rápido, y nos autotratamos con algo que no es específico para lo que tenemos, como cuando compramos un antifúngico cuando en realidad, lo que tenemos es una vaginosis bacteriana. Si tenemos algún síntoma, es mejor comenzar con algún probiótico oral o vaginal antes de usar un fármaco”, advierte.

Tras haber repasado las recomendaciones made in Hollywood carentes de base científica, las confusiones habituales y los mitos alrededor de la limpieza íntima, no podemos olvidar otro ámbito: el sexual. La doctora Maite Fernández subraya la importancia de orinar tras tener relaciones para que las bacterias que hayan podido estar en contacto durante la relación sexual no asciendan y provoquen al hacerlo una infección. “La orina funciona como un lavado de la uretra y hace que las bacterias se vayan hacia fuera. Es importante orinar siempre y, si suele haber problemas de hongos o infecciones a raíz de las relaciones, recomendamos también hacer un lavado vulvar con un gel íntimo; preferiblemente una espuma, que es lo más agradable al tacto”, aclara.

Como antes nos hemos adentrado en la cultura pop de la mano de Paltrow, no queremos dejar de mencionar ahora a Cameron Diaz, que en su libro Body Book , en el que da consejos para abrazar una vida más saludable y feliz, dedica un capítulo entero a defender el vello púbico llamado In Praise of pubes (Exaltación de los pubis) y a erigirse en contra de la depilación brasileña. En realidad, los ginecólogos coinciden con ella e indican que el cometido del vello púbico es proteger la zona de roces e infecciones. “Desde un punto de vista fisiológico, el vello nos protege la zona genital, por lo que recomiendo evitar la depilación total, dejando al menos uno o dos centímetros de vello, a modo de protección”, comenta la Dra. Bárbara Fernández del Bas, que comenta que ante la ausencia de vello, es especialmente necesario lavar la vulva con un gel íntimo. “El tema del vello se trata de una cuestión de moda: no está demostrado que haya más riesgo de tener infecciones. Sin embargo, lo que es cierto es que el vello aísla del roce, y la piel está más expuesta y desprotegida cuando no hay. Del mismo modo que el que lleva el pelo rapado tendrá que hidratarse la piel de la cabeza, necesitamos usar un gel íntimo y una crema hidratante en la vulva especialmente en estos casos”, aclara Maite Fernández.

Para finalizar, queremos recordar las divertidas palabras de la ginecóloga Marimer Pérez, que en uno de sus didácticos vídeos da un glorioso titular: “La vagina funciona como un horno pirolítico: se limpia sola”. Como podemos observar, en realidad, simplemente, hay que cuidar la vagina y la vulva de manera adecuada para no tener problemas, cuidar la flora y mantenerla saludable.

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