6 cosas que le pides a tu maquillaje este verano

1. Que cuide y proteja mi piel

Siempre es importante, pero ahora que la piel sufre los males veraniegos (sequedad, sol, manchas, alergias…) ¡más! Elige aquellos que son una extensión de los tratamientos de rostro de forma que preserven los beneficios de la cosmética, no agredan la piel, la defiendan de las agresiones externas, y, de paso, incorporen beneficios complementarios. Coloretes, como el Blush Prodige, con té blanco y extracto de tomate, que protegen la piel de los radicales libres y la contaminación; máscaras, como la Be Long de Clarins, con matriquina y pantenol, que favorecen el crecimiento y fortalecen las pestañas; y labiales, como el Rouge Eclat, con fitoesfingosina, que refuerza la barrera protectora de la dermis, favorece la síntesis de colágeno y actúa contra las pequeñas arrugas. ¿Por qué conformarse con menos?

2. Que pueda sacarle partido

Está claro que no puedes (¿o si?) cargar con todo lo que necesitas, pero lo que sí puedes es aprovechar mejor lo que te llevas. Se trata de exprimir al máximo tus cosméticos, adaptándolos a cada momento del día. Así, con un solo producto puedes lograr dos looks. Para conseguir un maquillaje efecto natural con tu BB Cream, matízala con polvos sueltos. Mientras que si lo que quieres es sofisticación nocturna, aplícate después de tu BB Cream, polvos de sol o colorete. Luce unos labios naturales durante el día rebajando tu labial con vaselina, y logra intensidad en tu boca, marcando el labial con un perfilador del mismo color. O logra un look de noche más elegante, humedeciendo el aplicador de tus sombras.

3. Que dure y dure

Nuestro maquillaje tiene que estar a la altura de las circunstancias y ser duradero. Está claro los retoques no están hechos para el verano. Por eso, apuesta por fórmulas de larga duración, como los labiales que mantienen el color intacto durante toda la noche o las sombras de ojos con fórmulas minerales, mucho más resistentes. Sin olvidar, las máscaras y lápices waterproof, que no pierden su poder aunque se enfrenten al agua. Y si no las has guardado, no está todo perdido. Usa un lápiz del mismo (o casi) color que tu barra, aplícatelo por todo el labio y pon después una capa fina de polvos. Termina con tu barra. Y ten a mano una agua termal, para fijar el maquillaje. Úsalo antes y al finalizar pulveriza también una ligera bruma.

Kit de maquillaje ‘Look Party’ de Clarins. Incluye colorete ‘Blush Prodige’, máscara ‘Instant Definition’ y labial ‘Rouge Eclat’.

4. Que sobreviva al calor

Las altas temperaturas y la humedad son enemigos de tu maquillaje. Para evitar desastres y lograr que se fijen los pigmentos, usa sombra en crema y tras un par de minutos, aplica polvos sueltos. No olvides que las sombras semimates aguantan mejor que las secas o grasas. Y al usar la máscara de pestañas, evita 'bombear' con el aplicador el frasco, para que el aire no entre e impedir, así, que el producto se seque.

5. Tamaños XS

Cuando tu neceser es nómada, los tamaños mini y los formatos monodosis son tu mejores aliados. Resultan perfectos para los viajes, especialmente cuando no facturas maleta, además no ocupan, dan de sí para todas las vacaciones y permiten probar otros looks. Otra opción es hacer un tour por tus establecimientos preferidos e ir recopilando muestras.

6. Dos en uno

Los productos multifunción son otros de tus imprescindibles en tu neceser. Porque además de ocupar un solo hueco, también cuestan lo que uno. Las BB Cream lideran el reino de los multitask. Matizan, iluminan, dan color, hidratan… ¿Qué más puedes pedir? Los Kiss & Blush también se han convertido en otro habitual 'especial viajes'. Rubor en labios y mejillas en un solo gesto. Aunque si se te ha olvidado guardarlo, no pasa nada, usa tu labial como colorete. Otra idea: la base como quitaojeras. ¡Funciona!

‘Baby Doll’, ‘Kiss and blush’ de Yves Saint Laurent.