El masajeador viral de cuero cabelludo: ¿sirve para algo?
Realizar un masaje capilar durante el lavado es el primer paso para un cuero cabelludo sano y una melena brillante. Pero ¿de verdad es necesario utilizar un masajeador específico?
La repetida consigna de que un cabello bonito comienza con un cuero cabelludo sano ha calado hondo y las rutinas capilares de varios pasos que tienen en cuenta sus cuidados son cada vez más populares. Desde hace tiempo, el cuero cabelludo protagoniza millones de tutoriales y los vídeos de TikTok con él como protagonista acumulan una cantidad ingente de visitas: los hashtags #scalp, #scalpcare y #scalpmassage cuentan con más de 1.100 millones de visualizaciones. Según el diario The Guardian, las búsquedas en Google de “masajeador de cuero cabelludo de silicona” han aumentado un 250% en los últimos 12 meses. A principios de año, el informe de predicción de tendencias de belleza para 2024 de la plataforma de análisis Spate indicaba que la cosmética capilar se había visto arrastrada por la industria del bienestar y los cuidados holísticos. Así, más allá del color o la textura, queremos un cabello saludable de raíz a puntas. En los últimos meses han aumentado las búsquedas en google sobre el crecimiento capilar (+86,6K), la picazón del cuero cabelludo (+16,8K) y el eccema (+9,5K). Quizá esta es la razón por la que exfoliantes, aceites y herramientas centradas en el cuero cabelludo, con los masajeadores al alza, arrasan en ventas. La pregunta es ¿realmente aportan beneficios o, como ocurre con las herramientas de masaje facial, su destino es acabar olvidadas en el cajón de objetos inútiles? Expertos resuelven las dudas.
¿Qué son los masajeadores de cuero cabelludo?
Como su nombre indica, son aquellas herramientas utilizadas para masajear la cabeza con el objetivo de “relajar y mejorar el riego sanguíneo de forma transitoria. Además, pueden calmar el picor y ayudar a relajar contracturas en la musculatura local del cuero cabelludo”, explica a S Moda el Dr. Víctor Cabezas, tricólogo de IMR (Instituto Médico Ricart). Están hechos de silicona o de madera y parecen un cepillo para el pelo pero, en lugar de cerdas, presentan nódulos puntiagudos o redondeados para frotar la cabeza. Algunos vienen con mango y otros se ajustan a la palma de la mano.
Para muchos, lo mejor de la visita al salón de peluquería es el masaje del cuero cabelludo porque relaja y alivia la tensión en segundos. Pero hay mucho más. Como explica Teresa Climent, licenciada en farmacia y Technical Manager de Nuggela & Sulé “nuestro cráneo crece hasta edades muy avanzadas y la piel que lo recubre no es capaz de seguir este ritmo de crecimiento; por eso, con el tiempo, pierde elasticidad y se tensa. Con los masajes, aumentamos la elasticidad y la circulación sanguínea en la zona y permitimos que los nutrientes y el oxígeno lleguen de forma adecuada al folículo. Esto se traduce en mayor fortaleza para el cabello. Los estudios lo han demostrado: el 75% de las personas que realizan masajes en su cuero cabelludo reportan un renacimiento del cabello. Eso sí, para obtener estos beneficios, deberíamos masajear nuestro cuero cabelludo todos los días al menos 15 minutos”.
¿Qué beneficios aportan estos masajeadores?
En los últimos años el cuidado del cuero cabelludo ha experimentado un crecimiento sin precedentes, pero ¿es necesario o se trata una moda para alargar las rutinas y aumentar el gasto sin notar la más mínima diferencia en nuestra melena? “Cada vez somos más conscientes de que no basta con cuidar la fibra capilar. Con el COVID-19, el estrés, la contaminación y la luz azul han aparecido nuevos signos de envejecimiento y se ha acelerado la caída. Por eso, los productos y los pasos se multiplican con exfoliantes, sueros ultra-concentrados, aceites especiales, herramientas tipo gua sha, peines y cepillos masajeadores de cuero cabelludo”, explica Miriam Quevedo, fundadora de su marca homónima y creadora del primer hair spa de España.
Los expertos aseguran que el ritual de cuidado del cuero cabelludo incluye una serie de pasos útiles. “Los exfoliantes eliminan células muertas, impurezas y residuos para oxigenar el bulbo capilar. Los aceites esenciales y los sueros tratan afecciones como caspa, psoriasis, caída o descamación. Por último, los masajes y los cepillos ayudan a mantener el cuero cabelludo más limpio y saludable, alivian la picazón, reducen la grasa e incluso la caspa. También promueven el crecimiento del cabello porque eliminan el exceso de sebo y la descamación que asfixia la raíz, y activan la circulación sanguínea en el folículo del cabello para que sea más fluida y reciba los nutrientes necesarios para retrasar la caída. Aunque no me canso de repetir que la base de todo empieza por seguir una dieta equilibrada, con el consumo de legumbres, verduras, fruta, frutos secos, carne, pescado y ¡mucha agua! La gente que come mal, tiene un pelo menos bonito, más frágil y quebradizo” explica Joao Soares, estilista de Maison Eduardo Sánchez.
Muchas marcas incorporan los cepillos de masaje en sus tratamientos para ayudar a la aplicación y absorción del producto. “La tendencia forma parte de la “skinificación” del cuero cabelludo, que consiste en tratarlo y cuidarlo como si fuese la piel del rostro”, dice el tricólogo Víctor Cabezas. Miriam Quevedo habla claro “tanto los masajeadores como los masajes manuales son necesarios para el cuero cabelludo porque estimulan la micro-circulación y permiten llevar los nutrientes, el oxígeno y los principios activos al folículo piloso. Además, potencian el efecto de los productos exfoliantes. Un sencillo gesto que puede frenar la caída y estimular el crecimiento”. El estudio Scalp massage: effect on hair growth publicado en la revista ePlasty en 2016 investigó los efectos del masaje regular en el cuero cabelludo sobre el crecimiento del cabello. Los participantes realizaron masajes diarios durante 24 semanas y los resultados mostraron un aumento significativo en la densidad del cabello.
¿Cómo debemos utilizar masajeadores de cuero cabelludo?
Utilizarlo es tan simple como frotar la herramienta sobre la cabeza. Aún así, como ocurre con la mayoría de los tratamientos de belleza, ser suave es fundamental. Caroline Greyl, presidenta de Leonor Greyl, explica “se pueden usar tanto en seco como en mojado y las acciones son diferentes. En seco son perfectos para estimular el riego sanguíneo, mejorar la circulación y realizar una suave exfoliación que elimina los restos de producto. Lo ideal es hacerlo antes de ir a la cama, puesto que la noche es el momento de regeneración por excelencia y, además, tiene un plus relajante. En mojado se usan para extender el champú o el exfoliante a la vez que se hace un masaje con movimientos circulares y después, se aclara con agua abundante”.
Cómo elegir el masajeador de cuero cabelludo adecuado para tu cabello
La popularidad de estas herramientas se traduce en que hay muchas opciones a considerar, pero es necesario encontrar la que mejor va con nuestro pelo y cuero cabelludo. “En general, los de púas anchas son apropiados para cabellos rizados o gruesos; y los de finas para cabellos lacios y finos. Los de plástico o silicona sirven para casi todos los tipos, pero los evitaría en cabellos debilitados. Los cepillos de bambú con puntas redondeadas evitan la rotura, pero si tienes el cuero cabelludo sensible lo mejor es optar por uno de silicona”, dice Joao Soares.
El tricólogo Víctor Cabezas aclara “en principio, la silicona es bastante adaptable, menos dañina que otros materiales más rígidos, por lo que sería apta para todo tipo de cuero cabelludo. El bambú es un material algo más rígido, que reduce el encrespamiento en cabellos difíciles de peinar con la ventaja de que no acumula electricidad estática. Los de púas muy finas y rígidas pueden producir tracción y arrancar el cabello. Es mejor cambiar a otro con unas púas más separadas y menos agresivas”.
¿Quién no puede utilizarlos?
Los masajeadores de cuero cabelludo son bastante seguros de usar, pero a veces pueden producirse efectos secundarios no deseados. “Lo más importante es hacer un masaje suave, de lo contrario podemos causar erosiones y heridas superficiales en la piel. Además, el exceso de tracción capilar puede acelerar la caída. No lo aconsejo en personas con dermatitis del cuero cabelludo mal controlada, puesto que la exfoliación puede dañarla todavía más. Tampoco deben usarse en heridas abiertas o infecciones”, añade el Dr. Cabezas.
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