Facebook actualiza sus normas comunitarias para hacer la red más amigable
A veces puede parecer una jungla, pero, en realidad, Facebook tiene sus normas de comportamiento, una suerte de Carta de los Derechos Humanos en la red social. Ha ampliado estas normas debido a la multiplicación de servicios y productos.
A veces puede parecer una jungla, pero, en realidad, Facebook tiene sus normas de comportamiento, una suerte de Carta de los Derechos Humanos en la red social. Y ahora, la compañía ha anunciado que ha modificado estas normas debido a la multiplicación de servicios y productos.
La red social asegura que su “objetivo es el de crear “un lugar para la expresión” y para “dar voz a las personas”. Su intención es la de que sus más de 2.000 millones de usuarios hablen de “forma abierta” de todos los temas que son importantes para ellos, “incluso si algunos no están de acuerdo o pueden resultarles objetables”.
Es más, algunas veces la red social asegura que admite contenidos que van en contra de sus estándares. El criterio para ello es que sea “noticiable y de interés público”. Sin embargo, asegura ser muy estricto con lo que se publica, y no son pocas las quejas por censuras por parte de la compañía californiana. Según Monica Bickert, vicepresidente de Política Global, cuando la red social coarta la libertad de expresión de sus usuarios lo hace por estas nuevas razones.
- Autenticidad: la compañía asegura que quiere asegurarse de que el contenido que se ve en Facebook es auténtico. “Creemos que la autenticidad crea un mejor ambiente para compartir, y es por eso por lo que no queremos que las personas usando Facebook para tergiversar lo que son o lo que hacen”.
- Seguridad: Según la vicepresidente Monika Bickert, la empresa se compromete “a hacer de Facebook un lugar seguro”, por lo que no permitirán expresiones de gente con “el potencial para intimidar, excluir o imponer el silencio de los demás”.
- Privacidad: “Estamos comprometidos a proteger la privacidad personal y la información”, asegura Bickert, dado que la privacidad “da a las personas la libertad de ser ellos mismos, y a elegir cómo y cuándo compartir en Facebook y conectar más fácilmente”.
- Dignidad: Facebook asegura que cree que “todas las personas son iguales en dignidad y derechos”, por lo que “espera que la gente va a respetar la dignidad de los demás y no acosar o degradar a los demás”.
En los últimos días se ha producido una actuación sonada por parte de Facebook. La compañía suspendió el jueves pasado de forma temporal un chatbot del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, tras la difusión de un mensaje de campaña contra los árabes que, según su partido Likud, él no había autorizado. "Los árabes nos quieren aniquilar a todos" recibieron este miércoles los usuarios de este chat, que se gestiona desde la página de Facebook de Netanyahu, en un texto que fue borrado poco después.
Sus censuras a veces crean polémica. La red bloqueó recientemente a un usuario por compartir una pieza de EL PAÍS sobre el planchado de senos a adolescentes africanas, una tortura ancestral apenas investigada. El caso de la foto de la niña del napalm es famoso. Facebook se empeñó en censurar la famosa foto tomada durante a guerra del Vietnam hasta que una campaña iniciada por el diario noruego Aftenposten logró que diese marcha atrás.
En agosto pasado, la red social anunció ya su intención de endurecer las normas sobre políticas de publicidad en los Estados Unidos. Así, está requiriendo nuevas exigencias de información para su sitio y para Instagram, antes de las elecciones presidenciales de noviembre de 2020. Todos los anunciantes que suban publicidad sobre política o temas sociales, también tendrán que publicar su información de contacto, incluso si no buscan el rótulo oficial. Deberán cumplir para mediados de octubre o se arriesgan a que se retiren sus anuncios.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.