Objetivo: salvar del cáncer a miles de mujeres en India
iBreastExam hace rápidos exámenes mamarios sin dolor ni radiación, y es portátil. La detención temprana salvaría a más de 70.000 indias que mueren en el país con más casos de este cáncer
Arropadas bajo coloridos sarees, las mujeres se agolpan, entre curiosas y apocadas, en el campamento que sirve de ambulatorio a las afueras de Pune, a 150 kilómetros de Bombay, capital financiera de India. “No ha dolido. Apenas he notado nada”, confiesa Lalita Manegatta, turbada tras el chequeo médico. Rompiendo el estigma que rodea al cáncer en una parte tan sensible como el pecho, Lalita y otro centenar de mujeres pasan por el pequeño habitáculo sin despliegues tecnológicos. Dentro, dos voluntarias manejan una tableta y una máquina del tamaño de un puño con la que hacen exámenes mamarios indoloros y libres de radiación.
El aparato es obra del ingeniero informático indio Mihir Shah en 2007, año en que su suegra sufrió cáncer de mama. El desarrollo posterior corrió a cargo de él mismo y su compañero Mathew Campisi en la Universidad de Ingeniería Biomédica de Drexel (Filadelfia). IBreastExam se basa en una tecnología de sensores y funciona con baterías. Detecta sutiles variaciones en el tejido mamario, ofreciendo resultados en pocos minutos mediante una aplicación móvil que graba los expedientes de las pacientes.
“Ha dado negativo así que volveré el año que viene para el seguimiento”, explica Lalita, quien a sus 35 años nunca había pensado en revisarse el pecho pese a acercarse a la edad de riesgo. “No pensé que fuese necesario. Ahora entiendo que hay que hacerlo”. La accesibilidad de iBreastExam, en términos económicos y logísticos, termina por convencer a las mujeres de zonas rurales de India, donde se evita pasar por complejos y costosos exámenes médicos por falta de recursos o de conocimiento. Según datos oficiales, más de 87.000 indias murieron de cáncer de mama en 2018; más que en ningún otro país del mundo.
Es el tumor más frecuente entre mujeres, cada hora tres españolas son diagnosticadas con cáncer de mama, según la Sociedad Española de Oncología Médica. Pero su detección temprana determina la esperanza de vida de las pacientes. Mientras un 90% sobrevive en España, solo el 66% lo consigue en India; donde más del 90% no tiene acceso a recursos. Por un lado, las mamografías apenas se usan en países en desarrollo, debido a su elevado coste. Por otro, escasean los profesionales cualificados: India cuenta con un radiólogo por cada 100.000 habitantes (en EE UU hay 12). Además, un escáner con iBreastExam vale menos de cuatro euros, cuando una mamografía puede costar hasta 35€ en India, al tiempo que el aparato se aprende a manejar en horas, lo que lo hace conveniente para auxiliares médicos en comunidades rurales, espina dorsal de sistemas sanitarios en países emergentes.
“No tuve problemas en manejar el aparato y no intimida a las pacientes”, explica Sarita Sonawale, de 60 años y una de las veinte voluntarias en Aashta; grupo de autoayuda que ha auscultado con iBreastExam a 30.000 mujeres en el último lustro. Sarita sobrevivió al cáncer de mama y sus consejos son vitales para que líderes locales y comunidades entiendan la necesidad de las revisiones y cómo afrontar la enfermedad. “Convencemos a sus familias para no las abandonen. Algunos creen que el cáncer se contagia”, cuenta Sarita, que refiere los casos positivos al especialista una vez se completa el examen médico
“El invento es buen sustituto del chequeo manual porque muchas mujeres indias no quieren que un extraño les toque el pecho, y su uso no necesita especialización. Multiplica los exámenes que se pueden hacer”, explica Shekhar Kulkarni, experto en cirugía mamaria que colabora en los chequeos con iBreastExam. Tras 20 años de profesión, el doctor Kulkarni alerta del aumento de cáncer en jóvenes indias. En ese sentido, subraya que el aparato puede aplicarse a mujeres entre 20 y 25 años; en cuyos pechos densos se desaconseja la presión de las mamografías. No obstante, el experto insiste en la eficacia de este último método como criterio médico de referencia: “La mamografía es la mejor técnica de detección de cáncer porque encuentra tumores no palpables, en fase de micro-calcificaciones. iBreastExam solo reconoce nódulos ya formados”.
"Aciertos significantes"
Aun hay que testar su fiabilidad en poblaciones mayores para acreditar su uso a gran escala. Un estudio publicado en el World Journal of Surgical Oncology concluye, sin embargo, que el iBreastExam detecta clínicamente lesiones significantes, con acierto. "Estamos registrando a pacientes en estudios de ejecución y clínicos, para respaldar su validación. El objetivo es cambiar los resultados mediante detección y diagnóstico tempranos", explica Mihir Shah, su creador y fundador de UE LifeSciences, empresa que comercializa el invento y que ha acordado examinar a 140.000 mujeres en México. A las 300 unidades existentes allí y en India, se unen 30 en Nepal, Myanmar, Indonesia, Oman y Botswana. Además, tienen autorización legal en Tailandia y Malasia, y planean exportarlo a otros países del Sureste Asiático y África.
A falta de un programa nacional contra el cáncer en India, el aparato es usado por ONGs como Aashta y en algunas clínicas. En 2016, el estado de Maharashtra inició una campaña para examinar a 250.000 mujeres con iBreastExam; ofreciendo seguimientos gratuitos y subvencionando posteriores biopsias y ultrasonidos. Precisamente esta tecnología de imágenes por ondas sonoras supuso un problema para la adopción iBreastExam en India; donde los ultrasonidos son utilizados para determinar el sexo de los fetos. Aunque prohibida por ley, esta técnica ha sido usada para el aborto selectivo de unos 12 millones fetos femeninos en treinta años en India, según la revista médica The Lancet; dando lugar a una de las mayores distorsiones en la proporción entre sexos del mundo. Así, los creadores de iBreastExam tuvieron que probar innumerables veces que el aparato no usaba ultrasonidos, sino que su potencial radica en su capacidad para salvar vidas.
Debate sobre los métodos de detección del cáncer de mama
iBreastExam tiene la desventaja de no distinguir entre bultos benignos, malignos o lesiones cancerígenas. “El 95% de las lesiones y nódulos mamarios son normales y solo un 5% son dañinos. Puede obligar a biopsias innecesarias y ser un lastre sanitario; reduciendo su rentabilidad”, explica a EL PAÍS RETINA el doctor Somashekhar, presidente de la Asociación de Cirugía Mamaria de India (ABSI, en sus siglas en inglés).
La desventaja incide en el debate global sobre técnicas de detección de cáncer de mama. Las mamografías también detectan elementos que, tras biopsias y revisión patológica, son falsos positivos. “Además, las mamografías encuentran microcalcificaciones indicativas de condiciones pre-cancerígenas que, a menudo, son indolentes y podrían no resultar en cáncer en la vida del paciente aunque se proceda con el tratamiento”, explica Somashekhar.
Kulkarni, resume en el dilema médico: “La ciencia ha sido incapaz de dar con los factores que conducen a la manifestación de este u otro cáncer. Tanto iBreastExam como las mamografías son métodos de detección, no de diagnóstico. Insuficientes, porque nuestro objetivo no es encontrar cáncer sino reducir las muertes”.
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