Un menor se inculpa de la muerte de un hombre en Valencia de la que es sospechoso su padre

Un niño de 14 años ha declarado ante la Guardia Civil ser el autor de la muerte de un hombre de 49 en Carlet (Valencia, 15.000 habitantes), pero los investigadores creen que en realidad quien lo mató fue el padre del menor. Por ello, señalan a EL PAÍS fuentes del caso, el progenitor permanece en prisión provisional y el chico, pese a su autoinculpación, ha sido puesto en libertad. La declaración del menor, añaden las fuentes, tendría presuntamente como objetivo proteger a su padre dado que la pena por homicidio es muy superior para un adulto.

El suceso se produjo avanzada la noche del 24 de diciembre en Villarrubia, una barriada pobre separada del núcleo urbano de Carlet donde reside fundamentalmente población de etnia gitana y que concentra la mayor parte de las actuaciones de los servicios sociales municipales.

Según fuentes conocedoras de la investigación, la víctima —que se había mudado al barrio hacía poco más de un mes desde la vecina Alginet— sufría un grave problema de adicción a las drogas y había tenido desde su llegada conflictos con varios vecinos. El enfrentamiento con el menor detenido y con otros chavales de Villarrubia tenía su origen en que la víctima les acusaba de haber matado a su perro, motivo por el cual había llegado a amenazarles con un machete.

El homicidio, adelantado por Las Provincias, se produjo de madrugada en plena calle. Según la reconstrucción inicial, basada en los testimonios de los dos implicados y de sus familiares, la víctima llamó al timbre de su casa, donde estaban celebrando la Nochebuena, a altas horas de la noche. Abrió la puerta el padre y, sin mediar palabra, el visitante le agredió con el machete haciéndole un corte junto al ojo. A continuación se produjo una pelea y el hombre falleció como consecuencia de los golpes que le propinaron, probablemente con uno de los troncos apilados a la puerta de la vivienda, que la familia utilizaba para calentarse.

Diferencia de penas

La Guardia Civil detuvo al día siguiente al padre, que fue tratado en el hospital del corte e ingresó en prisión provisional después de recibir el alta. Una semana más tarde, su hijo se ha declarado autor del homicidio, alegando que había golpeado al hombre después de que este hiriera a su padre. El menor fue llevado ante la Fiscalía de Menores y quedó en libertad a la espera de lo que determine la investigación. Fuentes próximas a la misma barajan que en la pelea contra el hombre pudieron participar más personas.

Las penas previstas por homicidio —a parte de que pueda apreciarse la legítima defensa— son muy diferentes si el autor es un adulto o un chico de 14 años. En el primer caso, el Código Penal prevé una condena de 10 a 15 de prisión. En el caso del menor, al hallarse comprendido en la franja de 14 a 16 años, la ley prevé, en cambio, su internamiento en un centro de menores por un periodo máximo de tres años.