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El alcalde de Cádiz, condenado a pagar una multa por calumniar al PP

Kichi aseguró que su antecesora en el cargo suministró agua contaminada “a sabiendas” a un barrio de la ciudad

Jesús A. Cañas
El alcalde de Cádiz, José María González 'Kichi', durante el juicio por presuntos delitos de calumnias contra el PP.
El alcalde de Cádiz, José María González 'Kichi', durante el juicio por presuntos delitos de calumnias contra el PP.Juan Carlos Toro

Al alcalde de Cádiz, José María González, Kichi, le va a salir caro pronunciar la expresión “a sabiendas”. Concretamente, una multa de 5.400 euros, además de una indemnización de 6.000 euros que tendrá que pagar a la anterior alcaldesa del PP, Teófila Martínez, y al concejal Ignacio Romaní del mismo partido. Es la condena que la Audiencia Provincial de Cádiz ha impuesto a González por un delito de calumnias por asegurar ante una asamblea de vecinos que la anterior regidora suministró con conocimiento agua contaminada al barrio de Loreto. 

Con la condena de la sección cuarta de la Audiencia, que González ya ha anunciado que presentará un recurso de casación ante el Tribunal Supremo, este sainete judicial suma un nuevo capítulo desde que arrancó en marzo de 2016. Fue entonces cuando, en una reunión vecinal, el alcalde aseveró: “No hay explicación que justifique dejar a sabiendas a un barrio consumir agua contaminada durante varios días”. Con ello, el alcalde señaló las responsabilidades municipales después de que el barrio de Loreto se quedase sin agua durante casi dos semanas por la presencia de bacterias en el suministro corriente. 

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El pronunciamiento —fechado el 28 de enero pero dado a conocer este viernes— ha caído como un jarro de agua fría en el Ayuntamiento ya que el Juzgado de lo Penal número 5 de Cádiz ya absolvió en julio de 2018 tanto a González, como a su jefe de gabinete, José Vicente Barcia y al exconcejal de Medio Ambiente, Manuel González Bauza. En aquella ocasión, el alcalde no logró evitar su foto sentado en el banquillo de los acusados, pese a que incluso la fiscalía pedía su absolución. La juez Esther Burgos consideró que la crítica era “desafortunada”, pero carente de injurias y calumnias, como sostuvo la acusación del PP. 

Ya al poco de saberse el veredicto, los populares dejaron claro que recurrirían la sentencia ante la Audiencia Provincial. Ahora, esta instancia le da la razón parcialmente y enmienda la plana a la magistrada Burgos. Si bien absuelve de responsabilidades a Barcia y a Bauza, sí cree que Kichi cometió un delito de calumnias con publicidad por sus palabras ante la asamblea. Pese a que en su aseveración el alcalde ni llegó a mencionar a la exregidora y su concejal, en el recurso la Audiencia considera que hizo “una imputación clara” contra personas que solo podían ser los querellantes. 

González tendrá que abonar una multa de 5.400 euros, además de indemnizar a Martínez y a Romaní con otros 6.000 euros y hacer frente a las costas judiciales. Sin embargo, él ya ha avanzado este viernes que recurrirá este nuevo pronunciamiento ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. “Estamos absolutamente convencidos de que en el barrio de Loreto se suministró agua no apta para el consumo durante 14 días”, ha aseverado el alcalde. 

“Volvería a actuar exactamente igual que lo hice, por cumplir mi compromiso por el barrio y para que conozcan todo lo que se les ocultó. No me van a amedrentar”, ha apostillado el alcalde de Por Cádiz Sí Se Puede, marca local de Podemos. 

No es la primera vez que el conflicto por ese “a sabiendas” se convierte en una historia con giros de guion inesperado. Seis meses después de que el PP se querellase contra Kichi y parte de su equipo, el Juzgado de Instrucción número 3 de Cádiz decidió archivarla. Consideró entonces unas apreciaciones similares a las que llevó a la juez de lo Penal a absolverlo: que las críticas fueron dentro del ámbito político y que no tenían un interés difamatorio. Pero en aquella ocasión, como ahora, la Audiencia Provincial enmendó el pronunciamiento y llevó finalmente a González al banquillo.

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Sobre la firma

Jesús A. Cañas
Es corresponsal de EL PAÍS en Cádiz desde 2016. Antes trabajó para periódicos del grupo Vocento. Se licenció en Periodismo por la Universidad de Sevilla y es Máster de Arquitectura y Patrimonio Histórico por la US y el IAPH. En 2019, recibió el premio Cádiz de Periodismo por uno de sus trabajos sobre el narcotráfico en el Estrecho de Gibraltar.

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