Se busca al dueño de un avión ‘fantasma’ en el aeropuerto de Barajas
Aena subastará el aparato si no aparece el dueño en el plazo de un año después de tres avisos seguidos en el 'Boletín Oficial del Estado'
Alguien aparcó un avión en el aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas y lo dejó abandonado. Este Mc Donnell Douglas MD87, un aparato con un historial de fracasos empresariales y en el que el tiempo y la inactividad comienzan ya a hacer mella, se encuentra en el aeródromo madrileño, sellado, y sin que nadie lo haya movido en años, como un fantasma de aluminio, cobre y titanio.
El aeropuerto trata ahora de conocer si alguien lo reclama como suyo y por eso la directora de Barajas, Elena Mayoral, firmaba el pasado viernes un aviso en el Boletín Oficial del Estado (BOE) en el que daba cuenta de la aeronave, con matrícula EC KRV y "en evidente estado de abandono".
Cuando una aeronave se encuentra estacionada en un aeropuerto durante un plazo largo sin realizar movimientos de entrada y salida, y con signos externos de abandono, se procede a consultar con el Registro de Matrículas de Aeronaves de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) y con el Registro Central de Bienes Muebles para averiguar posibles casos de cambio de titularidad y disponer del último propietario registrado, informa Efe.
Al último dueño que conste en los registros se le envía un requerimiento oficial para que abone el importe de la deuda existente por estacionamiento, con el fin de saber igualmente las intenciones del propietario sobre la misma. Si no abona la cantidad debida se inicia el procedimiento de apremio a través de la Agencia Tributaria, al tratarse de prestaciones patrimoniales de carácter público. Y se sigue la vía hasta su finalización por cobro mediante el pago voluntario o bien los procedimientos de apremio de los que se encarga la Agencia Tributaria.
Si el propietario no contesta o se averigua que el mismo ha desaparecido por los motivos que sean (como el fallecimiento sin herederos, la liquidación o el cierre de la empresa), se inicia el procedimiento establecido en la Ley de Navegación Aérea. De acuerdo con esta norma, se procederá a hacer tres publicaciones en tres meses consecutivos, indicando la matrícula de aeronave, el modelo y la marca, así como su situación de abandono. Transcurrido el plazo de un año desde la fecha de la última publicación en el BOE, se considera en situación legal de abandono y se inician los trámites para su venta en pública subasta.
El Mc Donnell Douglas MD87 que ya forma parte del paisaje del aeropuerto madrileño, el único que permanece abandonado en las instalaciones de Barajas, según Aena, voló por primera vez en 1990 para Iberia, según la revista Preferente.com. 18 años después fue adquirido por una aerolínea dedicada a los vuelos chárter que tenía sede en Albacete, Pronair. Sin embargo, esta sociedad, que tenía además otro aparato de este modelo y un Boeing 747 y que llegó a volar regularmente a China, sobrevivió apenas un año más. El aumento del precio de los combustibles y la Gran Recesión, que ya mostraba sus garras, abocaron al cierre de la compañía.
Dos años después el aparato fue adquirido por una empresa española con sede en Las Palmas que operaba sus dos aviones desde Madrid y que hasta entonces se había dedicado al transporte de mercancías, para poner en marcha una ruta de pasajeros entre España y Guinea Bissau. Sin embargo, la aeronave nunca voló para Saicus Air, sino que estuvo alquilada a terceros con tripulación incluida. La compra se realizó en julio de 2010 y en diciembre de ese mismo año la historia se repetía y la compañía propietaria del avión quebró.
Alguien selló entonces los motores, las tomas estáticas, los tubos Pitot y el resto de orificios. Hasta hoy.
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