El PP trabaja en reconducir a Vox “hacia el autonomismo”

Todas las direcciones nacionales de las fuerzas del bloque de derechas confían en que habrá un Gobierno en Andalucía del PP con Ciudadanos, presidido por el popular, Juan Manuel Moreno Bonilla; vicepresidido por Juan Marín, de Ciudadanos, y sostenido desde fuera por los 12 diputados de Vox. Sobre este dibujo no hay dudas en las cúpulas de las formaciones, pero no va a ser un camino de rosas. Los recelos entre el partido de Albert Rivera y del ultraderechista Vox están aún en fase alta, como ha comprobado la pasada semana el líder del PP andaluz.

Sus múltiples tareas tienen dos vectores fundamentales: el pacto con Ciudadanos y la reconducción de Vox. Ese será el orden cronológico, toda vez que el segundo reto llevará tiempo y deberá traducirse en el día a día. “Institucionalizar a Vox y llevarlo hacia el Estatuto de Autonomía andaluz para alejarlo de su discurso netamente nacional”. Este es el desafío de Juan Manuel Moreno, según explican fuentes del PP.

No hubo campaña andaluza para Vox ni falta que le hizo para ganarse el apoyo de 400.000 andaluces. Pero ahora ha entrado en el Parlamento de esa comunidad y su obligación es atender las necesidades de los ciudadanos de esa región, señalan los mismos interlocutores. “Lo primero que deben asumir es que su discurso y propuestas de campaña están fuera de las competencias de Andalucía, fuera del Estatuto”.

Inmigración y símbolos

Las fuentes consultadas recalcan que esta evidencia no lo es tanto para quien ha basado su éxito en sentar tesis sobre la inmigración, los símbolos nacionales o la seguridad en las calles. Desde el entorno de Moreno Bonilla señalan que “la reconducción pasa por no presentar en el Hospital de las Cinco Llagas [sede del Parlamento andaluz] iniciativas para derogar las leyes de memoria histórica y de violencia de género, la derogación de la autonomía catalana hasta la derrota sin paliativos del golpismo o el uso de la fuerza proporcional de cada español para defender su hogar”. Estas son propuestas textuales tomadas de su programa, absolutamente ajenas e impropias de un programa autonómico. En la oferta de Vox estaba “el cierre de las mezquitas” donde hubiera indicios de radicalismo o la construcción de sendos muros en Ceuta y Melilla.

La siguiente tarea está en que Ciudadanos se corresponsabilice con el PP en las tareas de gobierno para que la gestión sea compartida. Al tiempo, debe conseguir que los partidos de Albert Rivera y de Santiago Abascal aprendan a tolerarse