Un diputado del PP que iba a visitar a Pablo Ibar sufre un infarto en Miami

El diputado español Francisco Molinero Hoyos ha sufrido este miércoles un infarto de miocardio en Miami, Florida (EE.UU.), a donde había viajado junto a una delegación española del Senado para respaldar al hispano-estadounidense Pablo Ibar en el inicio el pasado lunes de la fase oral de un nuevo juicio por un triple asesinato. El parlamentario se ha desvanecido alrededor de las 5 de la mañana (hora local), cuando se disponía a regresar a España, y ha tenido que ser ingresado de urgencia en un hospital de la ciudad.

Molinero Hoyos, que es diputado del Partido Popular por Albacete, ha sufrido el infarto antes de emprender el vuelo de vuelta a Madrid y "se encuentra en observación mientras se recupera de la dolencia cardiaca", informó en un comunicado la Asociación contra la Pena de Muerte Pablo Ibar.

Como Vicepresidente de la Comisión de Justicia del Congreso de los Diputados, Molinero Hoyos era parte de la delegación de parlamentarios españoles que viajó a Florida para respaldar a Ibar en el comienzo de la fase oral de su juicio. Los parlamentarios se reunieron este lunes con Ibar en la cárcel de Fort Lauderdale, ciudad al norte de Miami donde se celebra el cuarto juicio al que es sometido por los asesinatos de Casimir Sucharski, Sharon Anderson y Marie Rogers en 1994. Los diputados definieron el encuentro como "emocionante"

Sucharski era propietario de un popular club nocturno de Pembroke Pines (Florida) y las dos mujeres bailarinas en su establecimiento. Los tres fueron asesinados por ladrones que entraron a robar en la casa de Sucharski en Miramar (sur de Florida).

Ibar libra desde entonces una batalla legal para demostrar su inocencia que tuvo uno de sus últimos episodios en 2016, cuando la Corte Suprema de Florida anuló su condena a muerte al considerar que las pruebas presentadas contra él fueron escasas y débiles y ordenó celebrar un nuevo juicio.

Además de mostrar su respaldo a Ibar, los diputados españoles viajaron a Florida para defender un juicio justo para el acusado y para mostrar su oposición a la pena de muerte.