Paco Lobatón: “Mientras no hay evidencia de muerte, hay esperanza de vida”
Presenta nuevo libro: "Te buscaré mientras viva" y continúa su pelea por visibilizar la situación de los familiares de los desaparecidos
El verano pasado, el periodista Paco Lobatón, que actualmente dirige el programa de TVE Desaparecidos con la colaboración de Prisa TV, emprendió un viaje por el sufrimiento y la angustia. Armado con una libreta y una grabadora digital recorrió España en busca de familias que llevan años sin saber nada de algún miembro desaparecido. El resultado es Te buscaré mientras viva, un libro que pretende hacer oír las voces de esas personas que viven en sitios marcados por las ausencias y los vacíos, ancladas en un tiempo pasado, en ese día, a esa hora, en ese lugar en el que se perdió el rastro de su ser querido para siempre. “Te parece que mis ojos te están mirando, pero se apagaron aquel día”, le dijo la madre de María Teresa Fernández, desaparecida en Motril (Granada) el 19 de agosto de 2000.
Pregunta. Has podido ver cómo se sobrevive a la desaparición de un ser querido.
Respuesta. El ser humano sometido a una situación extrema de sufrimiento, pero que no es una situación terminada ni terminal, sino provisional, genera fuerzas para intentar resolverlos, recuperando al ser querido o creando la capacidad para seguir viviendo sin él o ella. Los psicólogos lo llaman resiliencia (capacidad que tiene una persona para superar circunstancias traumáticas). Yo siempre me acojo a esa metáfora marina, un poco mágica, de la estrella de mar, que reproduce sus órganos mutilados.
P. Has tenido últimamente mucha relación con el padre de Diana Quer, Juan Carlos Quer.
R. Él está convirtiendo su duelo en una energía reparadora con una doble dimensión: resistir personalmente y ampliar la prevención a toda la sociedad, “que lo que me ha pasado a mí no le pase a nadie más”.
P. Todos (familiares, asociaciones de desaparecidos, el Gobierno) valoran mucho a los investigadores y, en cambio, ellos aseguran toparse con muchos problemas para investigar las desapariciones.
R. Es una evidencia. La mayor parte de los casos de desaparición terminan en sobreseimientos provisionales o archivos de causa porque están sometidos a la general de la ley y la Ley de Enjuiciamiento Criminal establece un periodo máximo de seis meses y si no hay a quien sentar en el banquillo en ese plazo de tiempo no hay causa. Una desaparición no es un delito, hasta que no se demuestre que hay un delito oculto en la desaparición, pero para eso hay que investigar. Es un círculo viciado en origen y que hay que romper generando una nueva herramienta legal que podría ser el Estatuto de las Personas Desaparecidas. Ya hay un trabajo en marcha en ese sentido.
P. ¿Qué tipo de trabajo?
R. Pues hay un laboratorio de observación permanente que puso en marcha la Fundación QSD Global que incluye a juristas y a representantes de las familias y que se va a ampliar próximamente con un foro que se está organizando junto a la UNED para elaborar las bases de ese estatuto y llevarlo al Congreso de los Diputados, con la condición de que prevalezca el espíritu de la Comisión Especial del Senado de 2013, en la que se hizo todo por consenso.
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