Podemos filtra su censo

Podemos ha emprendido un proceso de cambios en su método de participación interna, la más abierta de los partidos políticos españoles, que quiere controlar más. El partido de Pablo Iglesias, con un censo de 489.081 personas a las que bastó con inscribirse en su página web para participar en todos los procesos internos, exigirá a partir de ahora —tres años después de su nacimiento— la identificación por DNI a sus bases. El secretario de Organización, Pablo Echenique, ha anunciado la nueva exigencia, que empezará a ser obligatoria para participar en los congresos de Aragón y Baleares del próximo septiembre, con el objetivo de hacer el sistema de votación "más seguro".

Más información

Podemos no logra movilizar a sus bases en la consulta sobre la moción de censura

Podemos crea un nuevo censo de militantes para conocer su fuerza municipal

"Identifícate con Podemos" es el nombre de la campaña puesta en marcha por la Secretaría de Organización del partido, que se extenderá de forma progresiva a todos los territorios. Los militantes de Podemos —que no pagan cuota y tienen derecho a votar en todos los procesos internos, y en el partido se conocen como "inscritos"— tendrán ahora que registrar su DNI o documento homólogo para seguir ostentando el derecho de participación. Al registrarse, recibirán una "credencial de compañero de Podemos", esto es, un carné.

El proceso llevará a un filtrado del abultado censo de Podemos, cuyo récord de participación es el voto de 155.275 personas en el congreso de Vistalegre 2 del pasado mes de febrero. En ese congreso, celebrado hace solo cinco meses, la formación revalidó a Pablo Iglesias como secretario general, renovó todos los órganos y definió el nuevo rumbo político y los estatutos del partido. Todo ello con la votación de las bases sin identificar con un DNI.

El control de la inscripción como simpatizante modula uno de los principios fundacionales de Podemos, que nació poniendo en el centro la participación ciudadana más amplia posible. Restringir el censo ha despertado siempre recelos del sector errejonista, que considera que sus tesis políticas se parecen más a los votantes de Podemos y menos a los militantes, que suelen ser un colectivo más ideologizado.

Del censo de 489.081 personas inscritas en su web, se calcula que alrededor de un 40% es "durmiente", esto es, no ha participado en ningún proceso el último año. La formación suele distinguir entre el censo activo y el durmiente cuando ofrece los datos de participación en sus procesos internos. Se trata, por tanto, de un censo muy amplio que en parte es fantasma y al que Podemos no quiso denominar de "militantes".

Podemos ha puesto en marcha, en paralelo, la creación de otro censo de militantes que se suma al censo de inscritos. A los nuevos militantes les pide más datos personales y les pregunta si estarían dispuestos a concurrir en las listas del partido a unos comicios. Se trata de configurar un mapa de posibles cuadros con vistas a las elecciones municipales de 2019. En los comicios de 2015, Podemos no se presentó con su marca sino integrado en candidaturas municipalistas, entre otros motivos por la falta de cuadros. En el primer balance de este censo, el partido ha contabilizado 13.458 personas. La inscripción sigue abierta.

"Debemos organizar una campaña de afiliación para llegar a los 100.000 militantes y a 1.000.000 de inscritas y de inscritos", decía el documento organizativo de Pablo Iglesias que salió elegido en el congreso de Vistalegre 2. El objetivo irá algo más lento si Podemos pasa a filtrar su censo.