Sánchez hace frente común con los líderes territoriales contra Montoro

El frenazo en las expectativas electorales del PSOE en solo un mes, como refleja la encuesta de Metroscopia, no determinará un cambio en la nueva política de su secretario general, Pedro Sánchez, con la mirada más a la izquierda y la revisión de decisiones tomadas anteriormente. La ejecutiva decidirá hoy, de acuerdo con los líderes territoriales, votar en contra del techo de gasto que propone el Gobierno para 2018 aunque sí votó a favor en diciembre para el ejercicio de 2017.

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No hay comentarios sobre el descenso en las expectativas de voto que refleja Metroscopia con el argumento de que el PSOE no valora las encuestas. Este tropiezo no incidirá en las pautas que se ha marcado la ejecutiva que dirige Pedro Sánchez, que aún está en su momento más incipiente. En los próximos días, la ejecutiva federal socialista pondrá en marcha las sesiones de trabajo acordadas por el secretario general con el líder de Podemos, Pablo Iglesias, incardinadas en cinco mesas de trabajo. Al mismo tiempo, y en paralelo, establecerá otras líneas de estudio con Ciudadanos, tal como acordó con su presidente, Albert Rivera.

A falta de concreción en iniciativas parlamentarias, los primeros pasos, como el voto en contra del CETA o el hecho en sí mismo de crear una relación estable con Podemos, han desembocado en un parón en la línea de crecimiento de intención de voto que el PSOE observó desde la elección de Sánchez como secretario general el pasado 21 de mayo.

Un cambio significativo se concretará hoy cuando los socialistas decidan votar en contra del techo de gasto, a diferencia de lo que hicieron en diciembre pasado. No obstante, habrá un frente común compartido con los presidentes autonómicos. Ahora, los gobernantes regionales consideran injusto el esfuerzo de contención de déficit que se exige a las comunidades en relación a la que adjudica a la Administración central ya que son los Ejecutivos regionales los que soportan el peso de las políticas que afectan directamente a los ciudadanos. Los números son los responsables de que haya cambiado el clima entre el Gobierno y el PSOE.

En la reunión del pasado jueves del Consejo de Política Fiscal y Financiera los consejeros de Hacienda de los Gobiernos socialistas votaron en contra de la propuesta del Ejecutivo. Esta misma actitud tendrán los diputados socialistas cuando se someta a votación en el pleno del Congreso del próximo 11 de julio.

Sin reconciliación

En esta ocasión el Gobierno de la nación ha propiciado la unidad de criterio entre Sánchez y los líderes territoriales que no le apoyaron en las elecciones primarias para la secretaría general aunque la reconciliación no se ha producido, salvo en el caso del presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, que será quien hoy explique el voto de rechazo al techo de gasto. Los criterios de los presidentes autonómicos han sido “institucionales” y sujetos a los intereses de sus regiones, señalan los portavoces consultados. Nada tiene que ver, por tanto, esta coincidencia de criterio con asuntos internos de partido, recalcan.

La primera discrepancia con el Gobierno de los consejeros autonómicos se basa en el esfuerzo que se pide a las comunidades respecto al del Estado: las autonomías tienen que pasar de un déficit del 0,6% al 0,3% y el Estado, del 1,1% al 0,7%. “El Gobierno actúa con deslealtad institucional”, señala el consejero de Hacienda del Gobierno valenciano, Vicent Soler. Desde la Junta de Andalucía, su consejera de Hacienda, María Jesús Montero, ha tildado de “indecente” la propuesta del ministerio.