González: “No apoyaría a Díaz si se presenta porque la fastidiaría”

El expresidente del Gobierno Felipe González ha entrado hoy en la crisis interna del PSOE para destacar a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, como dirigente, pero se ha negado a apoyarla de forma explícita. "La fastidiaría", ha afirmado tras justificar que han perdido aquellos a quienes ha respaldado. Sí ha criticado abiertamente a Pedro Sánchez, el ex secretario general, de quien ha dicho que "no tenía cultura de partido" y que ha "intentado hacer lo que mejor que sabía, pero no sabía"

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González, en un acto del Grupo Joly en el que ha estado acompañado por la presidenta de la Junta de Andalucía y sus antecesores, José Antonio Griñán y Manuel Chaves, ha defendido el resurgir del socialismo y ha aportado su receta: "Tienen que recuperar la identidad de presentar un proyecto de país que acepta la diversidad sin romper la unidad. Ni una broma con el derecho a decidir y la autodeterminación. Quien lo defiende miente". A esto ha sumado la necesidad de una economía competitiva que mejore y favorezca la cohesión social y un "proyecto europeísta que nos dé [a España] la relevancia que estamos perdiendo a chorros".

El expresidente ha defendido la celebración de un congreso para solucionar la crisis de liderazgo, pero no se ha posicionado sobre los tiempos. "Ni es inmediato, como piden quien quiere aprovechar la descomposición, ni es a calendas griegas, que pretenden algunas, para ver si la breva cae cuando esté madura".

González se ha resistido a posicionarse en el debate interno, pero ha terminado por admitir que Susana Díaz "tiene fuerza y coraje, sin duda". "No sé cuántos más hay así", ha afirmado antes de decir claramente que no apoyaría a Susana Díaz si se presenta. "Todos a los que he apoyado han perdido. La fastidiaría", ha ironizado.

Avance del populismo

El expresidente ha retomado este jueves en Sevilla el discurso más socialista y ha abogado por emprender ya subidas salariales y por la "centralidad" para hacer frente a la crisis económica y política con "propuestas socialdemócratas del siglo XXI". "El populismo no camparía a sus anchas (...) y no habría avanzado tanto si no hubiéramos fallado en las respuestas que hemos dado a la globalización", ha afirmado. También ha atacado a los autoritarismos de cualquier signo: "Si triunfa un autoritarismo de izquierdas o de derechas nos joden, dejamos de tener espacio para desarrollarnos. Si triunfa el de izquierda, nos llaman socialtraidores; si es de derechas, nos llaman cómplices".

El dirigente socialista se ha negado a posicionarse sobre el presupuesto de Rajoy sin conocerlo. Tras advertir que no está en "la batalla", ha explicado que defendió "la abstención a cambio de nada para ser libres". "No es verdad que abstenerse implique hacerlo para cualquier ocurrencia de Rajoy", ha asegurado.

González ha demandado "un nuevo pacto social para el XXI" fundamentado en "decirle la verdad a la gente" en aspectos como la educación o el sistema de pensiones. "¿Cuánto nos va a costar el sistema de pensiones? No tenemos niños ni queremos inmigrantes. Tenemos que explicarle a la gente cómo vamos a financiarlo. Pueden ser las cuotas, pero no van a ser suficientes. Es necesario financiarlas vía impuestos porque tenemos más empleo, pero no más ingresos".

El expresidente ha afirmado que "no es suficiente que haya empleo". "Hay que dignificar el trabajo. Necesitamos ya este año la subida salarial. Hay que compensar nuestra capacidad de exportación con un mayor consumo interno. Si no se hace por ideología, que se haga por racionalidad. Hay que acabar con la precarización del empleo".

El expresidente ha advertido contra la tentación de combatir el populismo "simplificando lo complejo". "La gente que lo pasa mal y ha perdido expectativas de futuro no va a comprar el argumento de que el populismo lo haría peor. Hay que responder con respuestas socialdemócratas del siglo XXI. La única posible sería luchar contra las desigualdades que genera el modelo".

González ha insistido en centrar el debate político en la educación y en la sostenibilidad del sistema de pensiones: "La hucha está vacía y la financiación ordinaria no está alimentando el sistema. Necesitamos que alguien diga que se necesita el 12% del PIB para garantizar una pensión digna".

Ante los problemas de los ciudadanos han instado a los socialistas con una receta concreta: "Reconquistemos el espacio de la centralidad con respuestas a los problemas de los ciudadanos".

"Pasión por España"

Sobre el debate territorial se ha mostrado distante con los discursos nacionalistas. "Yo tengo pasión por España", ha afirmado en pleno debate interno y externo sobre las relaciones territoriales. En este sentido, González ha dicho que siempre ha defendido que hay que articular la diversidad dentro de la unidad. "Todas las democracias son plurales, pero hay que defender la diversidad, que tiene que ver con la identidad", ha explicado.

En cuanto a la situación política internacional, el socialista se ha referido a Donald Trump como la "amenaza del norte". "¿Qué esperamos del nuevo presidente de Estados Unidos? Que no cumpla lo que prometió a hacer en campaña. Veo dos actitudes. Un poco de sometimiento, como en los comienzos de Hitler, y los que se quieren aprovechar: Putin y los hijos de Putin", ha afirmado. Frente a esta situación, González ha defendido que no basta con más Europa, sino con una mejor Europa.

También ha criticado la política española en Latinoamérica, donde ha afirmado que España ni está ni se le espera, en referencia a la escasa influencia política y a la falta de apoyo a los empresarios.