Sánchez dice que “a día de hoy” el PSOE votará no a la investidura de Rajoy

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Pedro Sánchez ha dejado tras de sí una estela de dudas sobre cuál será el comportamiento político del PSOE si finalmente Mariano Rajoy, presidente del Gobierno en funciones, no consigue sumar 176 escaños a su favor para sacar adelante no solo su investidura sino “la gobernabilidad” del país. “A día de hoy”, el líder del PSOE sostiene que sus 85 diputados votarán en contra de la investidura de Rajoy y no ha aclarado si intentará forjar una mayoría en el caso de que el líder del PP fracase. “La democracia tiene sus tiempos y ahora es el de Rajoy”, señaló después de reunirse con el presidente en funciones durante una hora y 20 minutos. El PSOE “estará en la solución” para “desbloquear” la situación, sin decir cómo lo hará.

Las palabras literales del líder del PSOE conducen a distintas direcciones. El no absoluto de los socialistas llevaría indefectiblemente a la repetición de las elecciones, pero Sánchez se compromete a que eso no ocurra. En todo caso, considera que la responsabilidad es del candidato del PP, que debe tratar de buscar el apoyo de sus “afines”.  Al decir en distintas ocasiones que el voto del PSOE “a día de hoy” es negativo, deja en el aire un cambio de opinión. En ningún caso admite que sobre su partido caiga toda la responsabilidad, dejando a los demás liberados de hacerse cargo la repetición de elecciones por tercera vez en un año.

Las cosas no van por buen camino, según Sánchez, porque el ganador de las elecciones, 16 días después de su celebración, no ha conseguido ni un solo apoyo. Según distintas fuentes, en el PSOE se considera que si Rajoy lograra el sí de los 32 diputados de Ciudadanos —que hoy se sitúan en la abstención— la situación sería más fácil, ya que se podría involucrar a más grupos de la Cámara y entre todos, no solo los socialistas, complementar los 176 votos necesarios.

Pero nada de esto quedó ayer claro. El líder socialista trasladó al presidente del Gobierno en funciones su posición y la del comité federal de su partido, contraria a facilitar su investidura.

El jefe del Ejecutivo, por su parte, entregó a Sánchez un documento con cinco posibles acuerdos. Esta entrega, de momento, es inútil porque el PSOE no tiene intención de negociar propuestas concretas con el PP. “El señor Rajoy no puede contar con el PSOE para un Gobierno de gran coalición ni para pactar un programa de legislatura”, señaló Sánchez. “El señor Rajoy tiene que buscar apoyos entre sus aliados potenciales, entre los que no está el PSOE”, reiteró.

El líder socialista se adelantó a la pregunta segura de los periodistas —solo admitió media docena— de si el PSOE podría plantearse la abstención si Rajoy consiguiera el apoyo de Ciudadanos y Coalición Canaria y sumara 170 escaños, a 6 de la mayoría absoluta. “El señor Rajoy entre sus 137 escaños y los 176 tiene un camino que recorrer. En ese camino no estará el PSOE”.

A la pregunta sobre si intentará forjar una mayoría en el caso de que Rajoy fracasara en la suya, o ni lo intentara por falta de apoyos, no hubo respuesta. La posibilidad de que Sánchez trate de formar Gobierno provocaría una profunda división en el PSOE. La mayoría de los líderes territoriales se opondrían con el argumento de que con 85 escaños no se puede intentar gobernar.

En el comité federal del pasado sábado, la posición favorable a buscar una mayoría alternativa si Rajoy no lograra la investidura la defendieron la presidenta de Baleares, Francina Armengol; el primer secretario del PSC, Miquel Iceta; el secretario general del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca; y las secretarias generales del País Vasco, Idoia Mendia, y de Madrid, Sara Hernández. Para otros presidentes regionales esa opción es “descabellada”, como indicó en privado un líder autonómico.