Garzón llama a Sánchez e Iglesias para que negocien

El diputado de Unidad Popular-Izquierda Unida Alberto Garzón ha mantenido esta semana sendas conversaciones con el líder del PSOE, Pedro Sánchez, y con el de Podemos, Pablo Iglesias, sobre la posibilidad de formar un Gobierno conjunto. Garzón, al que ambas formaciones han emplazado a unirse a ese hipotético acuerdo de Ejecutivo, se había propuesto como “mediador” entre ambos. El diputado ha pedido a los dos dirigentes por separado que se reúnan y comiencen las negociaciones antes de que el Rey designe a un candidato a la investidura. Iglesias sí es favorable a abrir esa negociación, pero no así Sánchez, quien le transmitió que es a Mariano Rajoy a quien corresponde intentar el Gobierno y solo si él declina abrirá las conversaciones. En sus contactos con ambos, Garzón ha constatado que no han dialogado todavía.

La mediación de Garzón ha consistido en tratar de facilitar conversaciones entre el PSOE y Podemos antes de que Felipe VI decida a qué candidato propone para formar Gobierno. No lo ha conseguido porque se ha encontrado con la negativa de Sánchez, con quien habló el jueves de la semana pasada, según fuentes de su entorno.

El diputado de UP-IU llamó al secretario general del PSOE a última hora de la tarde y le emplazó a poner en marcha una mesa de negociación para intentar llegar a un acuerdo de investidura sobre la base de los programas. Considera Garzón, como Podemos, que no hay que esperar a la designación del Rey, sino al contrario: los partidos deben ir al encuentro con el Monarca con las conversaciones avanzadas. Con Iglesias su contacto es fluido. El líder de Podemos aseguró ayer que con Alberto Garzón el diálogo es “fructífero” y que están de acuerdo “en la mayoría de las cosas”.

Cuestiones compartidas

El dirigente de izquierdas considera que el PSOE, Podemos, IU e incluso muchos otros partidos con representación parlamentaria comparten políticas como la derogación de la ley educativa (LOMCE), de la conocida como Ley Mordaza, de la reforma laboral del PP, la paralización de los desahucios, la necesidad de impulsar planes de empleo público o la actuación respecto de los refugiados. En cambio, les separan el artículo 135 de la Constitución, la reforma laboral que hizo el PSOE o el referéndum en Cataluña, que Podemos e IU sí apoyan. Garzón cree que en la mesa de negociación que se abra deberían estar todos los partidos que puedan facilitar una investidura, incluso Ciudadanos, con el que sin embargo no cree que su formación pudiera llegar a ningún acuerdo de calado.