Rajoy amplía sus contactos para el pacto sin anticipar ninguna respuesta

El presidente Mariano Rajoy amplía la ronda de contactos con más líderes políticos para fraguar un pacto de Estado antiindependentista con el que aplacar el desafío en Cataluña, pero sin concretar cuál es la respuesta final que quiere liderar junto a PSOE y Ciudadanos. El Gobierno convocará el miércoles a los agentes sociales, los sindicatos y las principales patronales, pero tampoco les ha anticipado bien para qué. El PP limita por ahora las actuaciones conjuntas de los socios del pacto al ámbito de esos partidos en el Parlamento catalán.

La primera ronda de contactos políticos para lograr un pacto de Estado antisoberanista se cerrará este martes en La Moncloa con las citas de Mariano Rajoy con los líderes de Unió, Josep Antoni Durán Lleida, y de UPyD, Andrés Herzog, sobre los que se prevé su adhesión al frente formado la semana pasada por PP, PSOE y Ciudadanos. Los partidos constitucionalistas que no se sumarán al acuerdo serán Podemos, PNV e IU, que rechazan una solución "frentista" a la crisis catalana.

PP, PSOE, UPyD, Unió, Foro Asturias, Coalición Canaria y Unión del Pueblo Navarro serán los siete grupos políticos con diputados actualmente en el Congreso en funciones que suscriben el pacto de Estado antiindependentista promovido y liderado desde la semana pasada por el presidente Rajoy. Entre los siete suman 310 de los 350 parlamentarios actuales de la Cámara. Ciudadanos, que no está aún en el Congreso, pero se adivina en las encuestas como una fuerza determinante del futuro Parlamento tras el 20-D, también está de acuerdo en esos principios enunciados por Rajoy y que se limitan por ahora a un acuerdo genérico y verbal sobre la unidad de España, la soberanía nacional y el respeto a la ley y la Constitución.

"Será suficiente"

Rajoy no ha anticipado ni a Pedro Sánchez ni a Albert Rivera ni a los demás dirigentes con los que comparte esas bases cómo quiere que se escenifique esa unión, si es que hay planificada alguna fórmula. La ministra de Empleo, Fátima Báñez, llamó este lunes a los responsables de UGT, CC OO y las patronales CEOE y Cepyme para citarles este miércoles por la tarde a una entrevista en La Moncloa con el presidente para lograr su respaldo ante la crisis catalana, pero sin aportarles tampoco una propuesta sobre cómo.

Cuando este lunes se le preguntó al portavoz oficial del partido, Pablo Casado, tras una reunión del Comité de Dirección Nacional del PP, cómo podría escenificarse ese pacto se limitó a apuntar que "las estrategias no se cuentan" y que, mientras tanto, se utilizarán todos los instrumentos que permite la ley para evitar que el soberanismo prospere y avance en sus objetivos: "El PP y el presidente del Gobierno harán todo lo necesario para salvaguardar la unidad de España y, créanme, será suficiente". Y lo repitió dos veces. Luego añadió que su partido y España tienen frente a este reto no solo un candidato: "Tenemos un presidente del Gobierno".

Por la noche, tras terminar la ronda de entrevistas con Alberto Garzón, Cristina Cifuentes, Ximo Puig y Miguel Ángel Revilla, el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, tampoco pudo precisar qué actuaciones se podrían consensuar entre todos los socios del pacto. "Primero hay que analizar las propuestas de todos y luego habrá que ver actuaciones posteriores, primero sacar en claro las cosas en las que estamos de acuerdo y luego dejar fuera el debate o las discusiones estériles o de matiz. Hay una posibilidad de que haya una propuesta conjunta o de que no la haya", señaló Ayllón, que ejerce también como portavoz adjunto de La Moncloa. "Lo importante es la sintonía sobre los puntos de acuerdo", remachó y agradeció luego el buen tono de todas las entrevistas efectuadas.

La Moncloa no pudo confirmar anoche si con las entrevistas del miércoles con los interlocutores sociales se cierra esta tanda de contactos para lograr el Pacto de Estado antiindependentista.

El Gobierno, en realidad, ha ido improvisando desde la semana pasada los pasos a ejecutar ante la deriva catalana con todo tipo de rectificaciones y convocatorias sobre la marcha en La Moncloa. Con fuerzas claramente constitucionalistas y con otras que defienden más que matices a la viabilidad de las respuestas únicamente jurídicas y frentistas. Podemos, Izquierda Unida y PNV rechazan formar un bando con Rajoy para resolver este problema político y confían en que aún se está a tiempo para el diálogo, incluso cuando ya los soberanistas anuncian en Cataluña su voluntad de incumplir las leyes vigentes.

Los candidatos de Podemos e IU, Pablo Iglesias y Alberto Garzón, se lo aclararon a Rajoy frente a frente durante sus charlas "cordiales" en La Moncloa, en las que constataron que no están de acuerdo prácticamente en nada. Garzón llegó a bromear con que solo había coincidido con Rajoy en que ayer llovió en Madrid. La vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, llamó el viernes al presidente del PNV, Andoni Ortuzar, para invitarle a participar en estos encuentros pero el dirigente nacionalista vasco le replicó que su partido no quería siquiera ser invitados a La Moncloa porque no acudirían para participar en ese tipo de soluciones.

Santamaría llamó el viernes también a los diputados de Coalición Canaria, UPN y Foro Asturias y logró su apoyo sin necesidad de que Rajoy les reciba en La Moncloa.