El pacto de izquierdas en tres diputaciones gallegas se tambalea

A menos de 24 horas para que se celebre el primer pleno de constitución de una diputación en Galicia, se tambalean las negociaciones entre PSOE y Bloque Nacionalista Galego (BNG) para frenar gobiernos del PP en las provincias donde es la fuerza más votada pero sin mayoría absoluta –A Coruña, Pontevedra y Lugo-. Los nacionalistas “dan por interrumpidos” los contactos por la “falta de avances” en un acuerdo en el que exigen a los socialistas dos cosas: que se comprometan por escrito a ir desmontando desde dentro estas Administraciones que consideran obsoletas y “redundantes” y que retiren a su candidato a presidente del organismo en Lugo por arrastrar una imputación judicial.

El BNG, que ya ha gobernado con el PSOE las diputaciones de A Coruña y Lugo (esta última durante la legislatura que acaba de terminar), sostiene que esta vez quiere marcar un antes y un después para estas Administraciones “con merecida fama de caciquiles”. La propuesta que la formación liderada por Xavier Vence exige rubricar a los socialistas establece el traspaso progresivo a la Xunta y a los Ayuntamientos de las “competencias y recursos” que actualmente detentan estos organismos provinciales creados en el siglo XIX y que incluyen desde centros de menores, bibliotecas, teatros y museos hasta laboratorios y servicios de emergencias. Como su eliminación en España depende de un cambio en la Constitución, el objetivo del partido nacionalista gallego es “caminar hacia la desaparición” de las diputaciones de la mano del PSOE “adelgazando su funcionamiento” de tal manera que acabe limitándose a una mínima “cooperación jurídica y técnica” con los municipios.

El Bloque también aboga por “acabar con el presidencialismo” de estas instituciones, en las que el principal cargo suele concentrar el poder para repartir buena parte del presupuesto total. Encima de la mesa el BNG ha puesto la posibilidad de quedarse con la presidencia de la Diputación de A Coruña, aunque fuentes nacionalistas subrayan que esa propuesta “no es un escollo” para alcanzar un acuerdo.

Desde la dirección gallega del PSOE que encabeza José Ramón Gómez Besteiro, presidente en los últimos ocho años de un gobierno bipartito con los nacionalistas en la Diputación de Lugo, eluden valorar las condiciones del BNG para el pacto y la interrupción de las negociaciones. Este miércoles a las 12 horas arrancará el pleno de constitución del organismo provincial lucense, que marcará también lo que ocurra el próximo 13 de julio cuando se conformen los de A Coruña y Pontevedra. En este caso concreto, los nacionalistas también exigen a los socialistas que cambien de candidato a la presidencia porque el elegido por el partido, el alcalde de Becerreá, Manuel Martínez, arrastra una imputación por malversación de caudales públicos. Otros regidores socialistas de la provincia, como el de Castroverde, han pedido públicamente a Besteiro que no ceda al “chantaje” y mantenga a Martínez. La dirección socialista, sin embargo, también en este asunto opta por el silencio.