Podemos afirma que no pretende aislar al PSOE de Susana Díaz

Podemos hace equilibrios con su apoyo a la investidura de la presidenta de la Junta de Andalucía en funciones, la socialista Susana Díaz, y asegura que no quiere “aislar al PSOE”. Cuando faltan cinco días para que se celebre el debate, y tras la renuncia de los expresidentes Manuel Chaves y José Antonio Griñán, la formación de Pablo Iglesias mantiene sus dos condiciones. Reclama una respuesta sobre la propuesta de reducción de altos cargos y ruptura de relaciones entre la Administración y los bancos que desahucien. Una contestación que el PSOE promete dar de forma "puntual". 

A pesar de que el pulso entre ambas fuerzas sigue vivo, la dirección de Podemos y su líder en Andalucía, Teresa Rodríguez, no solo asumen que el diálogo será la pauta que marque el futuro de esta legislatura y del tablero nacional después de las elecciones municipales y autonómicas del 24-M, sino que afirman que no pretenden ejercer una oposición estéril. “La finalidad no es aislar al PSOE. Nosotros reconocemos el resultado de las elecciones”, mantuvo ayer Rodríguez. Esos comicios, señaló, llevaron a la necesidad de “debatir con Cámaras plurales donde cada uno plantea las reivindicaciones de sus votantes”. “No queremos participar en un juego de tronos para hacer un acuerdo contra Susana Díaz, queremos conseguir cosas para la gente”, prosiguió en una entrevista Antena 3.

Los dirigentes de Podemos creen que deben mostrarse firmes, pero a la vez dejar claro que buscan el diálogo y tratar de forzar alguna de las medidas que les han valido su éxito —sobre regeneración o desahucios, por ejemplo— antes de las elecciones generales. De hecho, la firmeza fue lo que todos resaltaron tras conocer la decisión de Chaves y Griñán.

En este contexto hay que mirar los próximos pasos del partido de Iglesias, que, en cualquier caso rechaza las "presiones" de otras fuerzas y lo que considera el intento del PP de vincularle al PSOE. Rodríguez da la primera condición por cumplida, aunque le hubiera gustado, dice, que los dos expresidentes asumieran responsabilidades políticas de forma más "valiente".