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El Ejército ha perdido el registro de detenidos

El Estado Mayor solo ha facilitado al juzgado "dispersa y escasa documentación"

Miguel González

La juez ha conseguido identificar a cinco de los legionarios que irrumpieron en la celda para agredir a los prisioneros (uno de ellos ya ha fallecido), pero no ha logrado saber quiénes eran sus víctimas. En teoría, debería de resultar fácil. La Brigada Plus Ultra, como todas las fuerzas de la Coalición Internacional, estaba obligada a llevar un registro de los prisioneros en el que deberían consignarse su identidad, las pruebas en su contra, exámenes médicos, hora de entrada y salida del centro de detención. Pero el Estado Mayor del Ejército ha comunicado al juzgado que no encuentra el libro de detenidos en sus archivos y solo ha facilitado "dispersa y escasa documentación".

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Es grave que el libro de detenidos se haya perdido. Y también sorprendente. El 17 de abril de 2006, en respuesta al diputado Gaspar Llamazares, de IU, el Gobierno comunicó al Congreso que las tropas españolas detuvieron en Irak a 111 personas, de las que 78 fueron entregadas a la policía local y 33, al Centro de Confinamiento de la Coalición en Bagdad, es decir, a la prisión de Abu Ghraib. ¿De dónde salieron esos datos si no se guardaba libro de detenidos?

A partir de la documentación recibida, el auto relata que el 26 de enero de 2004, solo cuatro días después del atentado que costó la vida al comandante de la Guardia Civil Gonzalo Pérez, tres iraquíes fueron arrestados por su supuesta implicación en un ataque con morteros contra Base Tegucigalpa, dependiente de la Brigada Plus Ultra, y que el 30 de enero se conoció un intento de envenenar la comida de los militares españoles. Dos de los capturados el 26 de enero se hallaban todavía bajo custodia del destacamento español el 4 de febrero, a pesar de que, en teoría, el periodo de detención se limitaba a 72 horas, y solo uno de ellos fue trasladado a Abu Ghraib el 7 de febrero.

El día 11 fueron detenidos otros dos iraquíes por su supuesta participación en el atentado contra una patrulla española en el que resultaron heridos cinco militares y un intérprete. El día 13, se les puso en libertad, una vez que se llegó al convencimiento de que no habían tenido nada que ver con el ataque. En un documento incorporado al sumario, al parecer la hoja de trabajo de uno de los interrogadores españoles, este dejó escrita una frase críptica: “Le pegaron, quién le pegó”. ¿Quería decir que uno de los detenidos había sido agredido?

El 11 de febrero, tres iraquíes que repartían folletos contra la ocupación fueron arrestados. Se les dejó en libertad el 19.

Es decir, además de los 111 detenidos que fueron entregados a la policía iraquí o a Abu Ghraib, hubo muchos más a quienes las tropas españolas pusieron en libertad. ¿Cuántos?

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Sobre la firma

Miguel González
Responsable de la información sobre diplomacia y política de defensa, Casa del Rey y Vox en EL PAÍS. Licenciado en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) en 1982. Trabajó también en El Noticiero Universal, La Vanguardia y El Periódico de Cataluña. Experto en aprender.

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