“España estará en cualquier operación contra el yihadismo”
Morenés subraya en Mali que Defensa seguirá en esas misiones
España está en la República Centroafricana (RCA) por solidaridad con Francia, pero en Mali está por su propio interés, porque éste es uno de los campos de batalla del yihadismo, que recluta combatientes en España para enviarlos a Siria o Irak. El Sahel es un inmenso territorio donde yihadistas y traficantes de armas, drogas y personas se mueven con mucha más fluidez que los gobiernos o las fuerzas de seguridad.
“Cualquier operación para poner coto a ese movimiento, en España, aquí [en Mali], en Siria o en el sur de Líbano, cuenta con el apoyo y contará con la participación de España”, ha asegurado el ministro de Defensa, Pedro Morenés, tras reunirse en Bamako con el presidente maliense, Ibrahim Bubakar Keita (IBK). Aunque Mali ya no está en el foco de atención internacional, como en enero de 2013, cuando la intervención francesa frenó la caída de la capital en manos de grupos vinculados a Al Qaeda, el presidente IBK trasladó al ministro su “preocupación por la situación”. La semana pasada, un atentado suicida mató a cuatro soldados chadianos de la misión de la ONU y, a finales de mayo, la ofensiva del Ejército maliense para tomar Kidal se saldó con un bochornoso fiasco.
Kidal no está en manos de los yijadistas de Ansar Dine o AQMI (Al Qaeda del Magreb Islámico) sino de los nacionalistas tuareg del MNLA (Frente Nacional de Liberación de Azawad), pero los soldados que atacaron Kidal habían sido instruidos por la misión de la Unión Europea (EUTM Mali) en la base de Kulikoro, a 60 kilómetros de Bamako, donde hay 110 militares españoles.
Por eso, Morenés, tras darle el pésame al presidente maliense por sus bajas, le advirtió de que “no es posible formar a buenos soldados en periodos de tiempo excesivamente cortos”. En su primer año, EUTM Mali ha instruido a cuatro batallones, a razón de tres meses cada uno, pero ahora se propone emplear el doble de tiempo para formar a otros cuatro. Además, en abril pasado inició el reentrenamiento de los primeros batallones que fueron instruidos.
Expertos militares advierten de que el problema no son los soldados sino la cadena de mando, la falta de coordinación, material adecuado y apoyo logístico, por eso la misión europea incluye el asesoramiento a las autoridades de Bamako para reformar el Ministerio de Defensa y la propia estructura de las Fuerzas Armadas.
Pero la solución, según los expertos, no puede ser solo militar. El yihadismo se ha aprovechado del malestar del norte de Mali, que históricamente se ha sentido discriminado respecto al sur y ha protagonizado varias rebeliones. Con la mediación de Argel, todos los grupos nacionalistas tuareg han llegado a un acuerdo para negociar conjuntamente con el Gobierno de Bamako, que se resiste a conceder cualquier autonomía a los tuareg.
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