El presidente del Congreso: “Nunca entendí la ‘teoría de la conspiración”
UPyD: “La teoría de la conspiración murió por inanición” El PP cree compatible la verdad judicial con la investigación de más detalles El PSOE solo quiere estar con las víctimas
Tocados, muy tocados en el ánimo y en el sentimiento, han llegado los portavoces parlamentarios a la Junta donde ordenan el pleno del Congreso. La misa en la catedral de la Almudena y los actos de conmemoración de las víctimas del 11-M, viéndolas cara a cara, les ha “encogido el alma”, como ha señalado uno de ellos. “Yo nunca he entendido la teoría de la conspiración”, ha dejado dicho el presidente del Congreso, Jesús Posada, reconfortado por ver unidas a las distintas asociaciones. “La teoría de la conspiración ha muerto por inanición”, ha proclamado Irene Lozano, de UPyD. “Es compatible respetar la verdad judicial con lo que pueda seguir sabiéndose e investigándose”, ha señalado el portavoz del PP, Alfonso Alonso, en un camino intermedio. Desde el PSOE ni una palabra sobre la controversia en torno a si se ha sabido o no lo esencial del atentado. “Hoy es el día de las víctimas y estar con ellas en su dolor persistente y para siempre”, ha afirmado Soraya Rodríguez, del PSOE.
Con un minuto de silencio el Congreso y el Senado rendirán homenaje a las 192 víctimas del 11-M y a los 1.900 heridos. Unas breves palabras pronunciadas por los presidentes de las Cámaras, Jesús Posada y Pío García Escudero, completarán este sencillo homenaje aunque tanto ellos como los portavoces parlamentarios han participado en los actos de estos días. El aldabonazo lo ha dado el presidente del Congreso, Jesús Posada, que con la máxima naturalidad se ha desmarcado del aliento que en algunos momentos se dio desde su partido, el PP, respecto a que ETA podría estar detrás de los atentados. “Yo nunca entendí la teoría de la conspiración”, ha reconocido el presidente. “Es normal que en un caso tan brutal se hubieran podido desbocar las teorías, pero ya se ha encarrilado; hay que mirar adelante”
La cierta normalidad con la que se afronta el 11-M en el décimo aniversario a la que alude Posada la sitúa en la unidad por primera vez de las víctimas y en la pérdida de fuerza, casi total, de la llamada teoría de la conspiración. Desde los grupos parlamentarios se reconoce que pueden quedar flecos en los pormenores de la perpetración del atentado pero siempre situado en el terrorismo islamista y no en ETA. “La teoría de la conspiración ha muerto”, ha sentenciado Irene Lozano de UPyD. “Es un caso cerrado desde hace mucho tiempo”, ha concluido. Aun así ha pedido que “cada uno reflexione sobre lo que hizo en ese momento”.
No ha querido Soraya Rodríguez, portavoz socialista, recién llegada junto a Rosa Díez de UPyD Alfonso Alonso del PP, Josep Sánchez Llibre de CiU y Aitor Esteban del PNV, entre otros portavoces de los actos con las asociaciones, entrar en lo padeció su partido. De manera esporádica el PP en la oposición interpelaba al Gobierno socialista sobre los hechos y la investigación.
Por su parte, el ministro del Interior, Jorge Fernández, ha rechazado cualquier vínculo del atentado del 11-M con ETA y ha subrayado, en una entrevista en Onda Cero, que, en 10 años de operaciones contra ETA, no han "aparecido vínculos" que puedan acreditar una "relación suficiente" entre ETA y el grupo que "estuvo en la génesis" del atentado.
"Las heridas políticas del 11M están ahí y siempre he dicho que los problemas que tenemos hoy en el ámbito de todo el Estado de la falta de entendimiento entre las dos grandes fuerzas políticas vienen referenciados desde el 11 de marzo de 2004", ha dicho el presidente de la Comisión de investigación del 11M, Paulino Rivero, presidente de Canarias. "Desde entonces, unos nunca aceptaron perder las elecciones y los que ganaron no tuvieron la generosidad para encuadrar ese triunfo en el marco de lo que ocurrió", ha añadido.
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