Díaz: “Andalucía es incómoda para el Gobierno, muestra que hay otro camino”

Diálogo. La presidenta de Andalucía, Susana Díaz, ha vuelto a proponer los acuerdos pactados como receta ante la cuestión soberanista y los enfrentamientos entre Gobiernos. La dirigente socialista con más poder ha pedido que las distintas administraciones se sienten para ver qué competencias presta cada una, qué se puede reformar o eliminar -como el Senado-, evitar duplicidades y fijar el modelo de Estado. En una entrevista en la cadena SER, Díaz ha insistido: "Los problemas se solucionan hablando. Habrá cosas en las que estemos de acuerdo, otras en las que no, pero necesitamos una salida".

Consciente de que la comunidad que preside representa el bastión socialista ante el mapa popular de España, Díaz ha admitido que “Andalucía es incómoda para el Gobierno" porque en su opinión "demuestra que hay otro camino". Pero ha insistido en la misma receta: "Hay que hablar siempre, hasta cuando no se está de acuerdo, porque los problemas se solucionan hablando, no dejando que se queden dormidos".

La presidenta de una región en los puestos de cabeza del desempleo, con 1.059.720 personas inscritas en las listas del Inem y una tasa de paro del 36,3%, ha afirmado que aspira a ser presidenta de una comunidad "más rica, con una renta más alta y que pueda contribuir a la solidaridad del Estado". Díaz ha culpado al sistema de financiación no se esté aplicando porque Andalucía y Cataluña menos de lo que les corresponden. "Supone que tengamos que prestar los servicios con menos recursos públicos y eso no es justo", ha argumentado.

También ha mostrado su preocupación por la tendencia centralista y ha acusado al Gobierno de querer "mermar la capacidad de autogobierno" de las comunidades. Ha puesto como ejemplo la ley educativa y la reforma local, a "las bravas" y contra las comunidades. "No tiene sentido. Esa situación se solucionaría, según ha apuntado, con un Senado que sirva para lo que tiene que servir y donde Gobierno central y comunidades dialoguen". "Cuando una institución no sirve para lo que tiene que servir, se elimina", ha vuelto a plantear sobre el futuro de la Cámara Alta.

Sobre los argumentos del PP para "recentralizar y enfrentar a los territorios" con la supuesta premisa de que las comunidades despilfarran, ha dicho que las comunidades "realmente están garantizando lo más básico, sobre lo que se asienta el Estado del bienestar".