Las audiencias provinciales estudiarán los recursos de 14 asesinos y violadores

La sentencia del tribunal de Estrasburgo sobre la doctrina Parot afecta no solo a presos de ETA, el grupo mayoritario, sino también a otras 37 personas declaradas culpables de terrorismo —miembros del GRAPO y de los GAL— y de delitos especialmente graves, como asesinatos múltiples, violaciones o tráfico de droga a gran escala. Los recursos de los terroristas y narcotraficantes para lograr la puesta en libertad serán analizados por la Audiencia Nacional, competente en esta materia. En el resto de los casos, los recursos serán estudiados por las audiencias provinciales en las que fueron juzgados y condenados los reos. En la Audiencia Provincial de Madrid se analizarán los casos de Joaquín Villalón Díez, apodado el asesino señorito, y Pablo Manuel García, conocido como el violador del portal. Ambos fueron condenados en los años noventa aunque sus delitos se cometieron cuando estaba en vigor el Código Penal de 1973.

Villalón fue condenado en 1995 a 58 años y 10 meses de prisión por delitos de asesinato, homicidio y robo. El asesino señorito estranguló y descuartizó en 1981 a su pareja, hechos por los que fue condenado a 17 años de cárcel. En septiembre de 1992, durante un permiso penitenciario, mató a dos mujeres transexuales en Madrid en un lapso de 10 días. La primera fue hallada inconsciente y envuelta en llamas y falleció a los cuatro meses en el hospital. La segunda fue encontrada muerta en la bañera con evidentes signos de violencia.

Pablo Manuel García Ribado ha recibido condenas que suman 1.716 años de cárcel como autor de 74 violaciones y ocho agresiones sexuales cometidas entre el 24 de diciembre de 1990 y el 9 de octubre de 1993. A él y a su compinche, Antonio Barroso, se les conocía como los violadores del portal.

Otro delincuente que genera gran preocupación en las fuerzas de seguridad es Juan Manuel Valentín Tejero, condenado a 50 años de cárcel por el secuestro, violación y asesinato de la menor Olga Sangrador en Valladolid en junio de 1992. Cuando cometió el crimen, también durante un permiso penitenciario, Valentín Tejero cumplía condena de 13 años en la cárcel de Villanubla por dos violaciones, abuso sexual a menores, exhibicionismo y robo. Con la aplicación de la derogada doctrina Parot, habría permanecido en prisión hasta el año 2025. La Audiencia de Valladolid deberá revisar este cómputo de acuerdo con lo previsto en el Código Penal de 1973, lo que puede suponer su excarcelación a muy corto plazo.

Por su parte, Pedro Luis Gallego Fernández, conocido popularmente como el violador del ascensor y condenado por los asesinatos de las jóvenes Leticia Lebrato y Marta Obregón y 18 violaciones tenía prevista su salida en 2022. Sin embargo, la derogación de la doctrina Parot también adelantará su puesta en libertad si así lo decreta la Audiencia de Valladolid.