La delegada de Roca en Madrid y su principal testaferro, cuatro años de cárcel
La abogada Montserrat Corulla también deberá pagar una multa de 30 millones de euros
La abogada Montserrat Corulla comenzó a trabajar en 2001 en el despacho de abogados de Manuel Sánchez Zubizarreta, quien tenía un cliente muy especial: Juan Antonio Roca. Sería detenida el mismo día que se desató el caso Malaya, junto a Roca y otros personajes conocidos. Según la sentencia conocida este viernes, Corulla ha sido condenada “como responsable en concepto de autora de un delito continuado de blanqueo de capitales” y pertenencia a organización delictiva. La pena es de 4 años de prisión y de una multa de 30 millones de euros (el ministerio fiscal pedía una multa de 100 millones). Asimismo, ha sido inhabilitada para el ejercicio de su profesión durante cinco años.
Según el juez Miguel Ángel Torres, instructor del sumario de la operación, la supuesta testaferro principal de Roca en Marbella desempeñaba un papel importante en la trama. Tenía bajo su responsabilidad las mejores inversiones del cabecilla en Madrid. Era administradora de una de las principales sociedades de Roca, Condeor, dedicada a transformar valiosos inmuebles protegidos en hoteles de lujo. También gestionaba algunos asuntos en Murcia, otro lugar adonde Roca, natural de esa provincia, estaba dirigiendo sus inversiones.
Corulla, quien descartó montar un negocio de masajes o hacerse notaria antes de entrar en el despacho de Sánchez Zubizarreta, aseguró en su declaración como imputada que nunca ocultó que el dueño de Condeor era Roca y que su trabajo se ajustaba a la legalidad. “No sé quién era el titular de la participaciones en Maras, pero quien mandaba era el señor Roca, no el señor Gardoqui”, señaló.
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