_
_
_
_

Publio Cordón espera a que pase el Tour

La Guardia Civil y los técnicos volverán al monte Ventoux en busca del cuerpo del empresario Fue secuestrado en 1995 y se conocen todos los detalles, salvo dónde están los restos

El empresario Publio Cordón en su despacho.
El empresario Publio Cordón en su despacho.© Aulocolor

El empresario Publio Cordón Munilla fue secuestrado por los GRAPO el 27 de junio de 1995 cuando practicaba footing a la salida de su vivienda, por los alrededores del Canal Imperial de Zaragoza. Durante los 18 años transcurridos, el caso ha sido investigado por la policía, por la Guardia Civil, por el Centro Nacional de Inteligencia. De resultas de estas pesquisas, se ha sabido quiénes participaron en el rapto y custodia del rehén, dónde estuvo este encerrado, dónde pagó la familia el rescate exigido por los terroristas... Se sabe casi todo, excepto dónde está el cadáver de Publio. Y el Ministerio del Interior quiere poner el punto final a este caso.

El grapo arrepentido Fernando Silva Sande, empezó a colaborar con la policía en 2008. Testificó que Cordón murió al intentar huir de la casa donde estaba cautivo y confesó que él mismo había enterrado su cadáver en un paraje del monte Ventoux, a 250 kilómetros de Lyon (Francia), donde estuvo retenido 15 días.

El exdirigente de los GRAPO ha sido excarcelado desde entonces en tres ocasiones para acompañar a guardias civiles en busca del hoyo donde los terroristas arrojaron el cadáver, según fuentes de la investigación. Los rastreos y las catas realizados fueron negativos debido a que Silva ha perdido los referentes del paisaje, que ha sido muy modificado durante tres lustros.

Búsqueda en el monte Ventoux (Francia) de los restos de Publico Cordón con un radiómetro de protones.
Búsqueda en el monte Ventoux (Francia) de los restos de Publico Cordón con un radiómetro de protones.

A mediados del mes pasado, un grupo de guardias civiles regresó al monte Ventoux acompañados de Silva Sande y el geofísico Luis Avial, equipado con un gradiómetro de protones. ¿Objetivo? Localizar un pico metálico empleado para excavar la tumba y que, según Silva, fue arrojado dentro del agujero junto con el cadáver del empresario. La deducción es sencilla: si el gradió-metro de protones detecta el pico, es seguro que junto a él estará el esqueleto de Cordón. Los investigadores otorgan "total credibilidad" a las indicaciones del exjefe de los GRAPO.

El monte Ventoux es un paraje cubierto de grandes pinos. A partir del testimonio de Silva Sande, la Guardia Civil ha acotado una zona de 40.000 metros cuadrados en la que sospecha que Cordón está sepultado. Esa es la superficie que Avial empezó a rastrear el pasado 16 de junio con un aparato que permite radiografíar el terreno a través de los protones (partículas subatómicas) que emiten los objetos.

El día 18, la máquina captó una señal "muy interesante", según fuentes de la investigación.Los buscadores, nerviosos y excitados, excavaron el punto indicado por el aparato, convencidos de que habían dado con el pico utilizado por los grapos para hacer el agujero. Sin embargo, toda su emoción se tornó en desilusión cuando comprobaron que allí no estaba el pico tan buscado.

No sería la única frustración: otro día, el gradiómetro marcó otro punto sospechoso. De nuevo, el equipo de búsqueda horadó el terreno con la esperanza de hallar la herramienta. Pero lo único que encontraron fue un rollo de cable, probablemente olvidado tiempo atrás por quienes hicieron un tendido eléctrico.

El alcalde de Bédoin, Luc Reynar, en cuya demarcación está el monte Ventoux, la policía francesa y hasta un guarda forestal que conoce la demarcación como la palma de su mano, han colaborado estrecha y activamente con la Guardia Civil y con Avial para intentar coronar con éxito la búsqueda del cadáver del empresario zaragozano.

"El terreno, por su peculiar composición y por estar cuajado de árboles, dificulta mucho los trabajos", admite uno de los investigadores. Además, en la cúspide del monte hay un potente radar militar que distorsiona las señales que capta el gradiómetro de protones.

Más información
El juez Gómez Bermúdez retoma la busca del cadáver de Publio Cordón
Publio Cordón fue enterrado por Sande y los dos últimos detenidos
15 días de secuestro; 17 años de búsqueda
Los secuestradores ocultaron a Cordón en un zulo en un barrio bien

Los guardias civiles que han participado en la expedición a Francia, así como los técnicos de la empresa Cóndor, propiedad de Luis Avial, regresaron a España hace unos días. Pero ninguno de ellos se siente fracasado. Es más, tienen la convicción de que están siguiendo la pista correcta y de que, tarde o temprano, darán con los restos de Cordón.

Avial y sus colaboradores, que no perciben ni un euro por su colaboración con la justicia, tienen ahora por delante una dura tarea: analizar los miles de datos recogidos por el gradiómetro de protones —un artilugio que usa dos sensores para detectar los campos electromagnéticos— a lo largo y ancho de los 40.000 metros rastreados. Eso les ocupará previsiblemente dos semanas. El objetivo es cribar los indicadores registrados por el aparato, de forma que queden reducidos a tres o cuatro los puntos en los que probablemente duerme el pico metálico de los GRAPO.

Es previsible que el equipo de rastreo regrese a Francia por quinta vez en los últimos años, con la ferviente esperanza de que sea la última y definitiva. Según las fuentes informantes, será después del próximo 14. Porque ese día, los ciclistas del Tour acabarán la etapa más larga de la actual edición precisamente en el monte Ventoux. La zona estará plagada de aficionados. Cuando ellos se marchen, es probable que la Guardia Civil vuelva allí tras el rastro de un pico. Tras la tumba de Cordón.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_